Encontrados 15 resultados para: yendo

  • y soltó un cuervo, el cual revoloteó, yendo y viniendo hasta que la tierra estuvo seca. (Génesis 8, 7)

  • y sus fronteras llegaron desde Sidón hasta Gaza por el camino de Guerar; y hasta Lesa, yendo hacia Sodoma, Gomorra, Admá y Seboím. (Génesis 10, 19)

  • El Señor dijo a Moisés: "Pronto irás a descansar junto con tus padres, y este pueblo se prostituirá yendo detrás de dioses extraños, los dioses de la tierra donde está por entrar; me abandonará y quebrantará la alianza que hice con él. (Deuteronomio 31, 16)

  • Pero aquel día yo mantendré oculto mi rostro, por todo el mal que ellos hicieron yendo detrás de otros dioses. (Deuteronomio 31, 18)

  • Desde allí, yendo hacia el este, pasaba a Guita Jéfer, y a Itá Casín; después llegaba a Rimón y doblaba hacia Neá. (Josué 19, 13)

  • Pero los israelitas no escuchaban a sus jueces, sino que se prostituían, yendo detrás de otros dioses y postrándose delante de ellos. Se desviaban muy pronto del camino seguido por sus padres, que habían obedecido los mandamientos del Señor. Ellos, en cambio, no hacían lo mismo. (Jueces 2, 17)

  • Pero mientras yo estaba ocupado, yendo de acá para allá, el hombre desapareció". El rey le replicó: "¡Está clara tu sentencia! La has pronunciado tú mismo". (I Reyes 20, 40)

  • Él cometió las peores abominaciones, yendo detrás de los ídolos, como lo habían hecho los amorreos que el Señor había desposeído delante de los israelitas. (I Reyes 21, 26)

  • El Señor le dijo: "¿De dónde vienes?". El Adversario respondió al Señor: "De rondar por la tierra, yendo de aquí para allá". (Job 1, 7)

  • El Señor le dijo: "¿De dónde vienes?". El Adversario respondió al Señor: "De rondar por la tierra, yendo de aquí para allá". (Job 2, 2)

  • No te empobrezcas yendo de fiesta con dinero prestado, cuando no tienes nada en el bolsillo. (Eclesiástico 18, 33)

  • a causa del mal que cometieron para agraviarme, yendo a quemar incienso en honor de otros dioses que no conocían ellos, ni ustedes, ni sus padres. (Jeremías 44, 3)


“A cada vitória sobre o pecado corresponde um grau de glória eterna”. São Padre Pio de Pietrelcina