Encontrados 47 resultados para: Lepra

  • Al séptimo día lo examinará, y si se ha extendido por la piel, el sacerdote lo declarará impuro; es un caso de lepra. (Levítico 13, 27)

  • el sacerdote examinará la llaga, y si ésta aparece más hundida que la piel, y si hay en ella pelo amarillento y más ralo, el sacerdote lo declarará impuro; es tiña, o sea, lepra de la cabeza o de la barbilla. (Levítico 13, 30)

  • Pero si en la calva, por detrás o por delante, aparece una llaga de color rojizo, es lepra que se ha producido en la calva, sea por detrás o por delante. (Levítico 13, 42)

  • El sacerdote la examinará y si la hinchazón de la llaga en la parte calva es de color blanco rojizo, con aspecto de lepra en la piel, (Levítico 13, 43)

  • se trata de un leproso: es impuro. El sacerdote le declarará impuro; tiene lepra en la cabeza. (Levítico 13, 44)

  • El afectado por la lepra llevará los vestido rasgados y desgreñada la cabeza, se cubrirá hasta el bigote e irá gritando: «¡Impuro, impuro!» (Levítico 13, 45)

  • Cuando aparezca una llaga de lepra en un vestido de lana o de lino, (Levítico 13, 47)

  • si la mancha en el vestido o en la piel, o en el tejido o en el cobertor, o en cualquier objeto hecho de cuero, tiene color verdoso o rojizo, es llaga de lepra y debe ser mostrada al sacerdote. (Levítico 13, 49)

  • Al séptimo, el sacerdote examinará la mancha y si se ha extendido por el vestido, tejido, cobertor, piel o por un objeto de cuero, es un caso de lepra maligna y el objeto es impuro. (Levítico 13, 51)

  • Se quemará el vestido, tejido, cobertor de lana o de lino o el objeto de cuero en que se encuentre la mancha, pues es lepra maligna; será quemado. (Levítico 13, 52)

  • Pero si vuelve a aparecer en el vestido, tejido, cobertor o en un objeto de cuero, es mal contagioso; quemarás lo que está afectado por la lepra. (Levítico 13, 57)

  • Estas es la ley para la mancha de lepra que se halla en los vestidos de lana o de lino, en el tejido e en el cobertor o en cualquier objeto hecho de cuero, para declararlos puros o impuros. (Levítico 13, 59)


“Deus é servido apenas quando é servido de acordo com a Sua vontade.” São Padre Pio de Pietrelcina