Encontrados 731 resultados para: Mujer

  • El que se acueste con la mujer de su padre, ha descubierto la desnudez de su padre; ambos morirán: caerá sobre ellos su sangre. (Levítico 20, 11)

  • Si alguien se acuesta con varón, como se hace con mujer, ambos han cometido abominación: morirán sin remedio; su sangre caerá sobre ellos. (Levítico 20, 13)

  • Si uno toma por esposas a una mujer y a su madre, es un incesto. Serán quemados tanto él como ellas para que no haya tal incesto en medio de vosotros. (Levítico 20, 14)

  • Si una mujer se acerca a una bestia para unirse a ella, matarás a la mujer y a las bestia. Morirán; caerá sobre ellos su sangre. (Levítico 20, 16)

  • El que se acueste con mujer durante el tiempo de la reglas descubriendo la desnudez de ella, ha puesto al desnudo la fuente de su flujo y ella también ha descubierto la fuente de su sangre. Ambos serán exterminados de entre su pueblo. (Levítico 20, 18)

  • El que se acueste con la mujer de su tío paterno, descubre la desnudez de éste. Cargarán con su pecado; morirán sin hijos. (Levítico 20, 20)

  • Si uno toma por esposa a la mujer de su hermano, es cosa impura, pues descubre la desnudez de su hermano; quedarán sin hijos. (Levítico 20, 21)

  • El hombre o la mujer en que haya espíritu de nigromante o adivino, morirá sin remedio: los lapidarán. Caerá su sangre sobre ellos. (Levítico 20, 27)

  • No tomarán por esposa a una mujer prostituta ni profanada, ni tampoco una mujer repudiada por su marido; pues el sacerdote está consagrado a su Dios. (Levítico 21, 7)

  • Había salido con los israelitas el hijo de una mujer israelita y de padre egipcio. Cuando el hijo de la israelita y un hombre de Israel riñeron en el campo, (Levítico 24, 10)

  • Mas si se trata de una mujer, el valor será de treinta siclos. (Levítico 27, 4)

  • De los cinco a los veinte años el valor será: para varón, veinte siclos; para mujer, diez siclos. (Levítico 27, 5)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.” São Padre Pio de Pietrelcina