Encontrados 18 resultados para: Purifica

  • El que se purifica lavará sus vestidos, se afeitará todo su pelo, se bañará en agua, y quedará limpio. Después podrá entrar en el campamento; pero durante siete días ha de habitar fuera de su tienda. (Levítico 14, 8)

  • Con el aceite restante que tiene en su mano el sacerdote untará el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, el pulgar de su mano derecha y el de su pie derecho sobre la sangre de la víctima de reparación. (Levítico 14, 17)

  • El resto del aceite que quede en la mano del sacerdote, se echará sobre la cabeza del que se purifica. El sacerdote expiará así por él ante Yahveh. (Levítico 14, 18)

  • El sacerdote ofrecerá el sacrificio por el pecado y hará expiación por el que se purifica de su impureza; después inmolará el holocausto. (Levítico 14, 19)

  • Después de haber inmolado el cordero del sacrificio de reparación, el sacerdote tomará sangre de la víctima de reparación y mojará el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, el pulgar de su mano derecha y el de su pie derecho. (Levítico 14, 25)

  • untará con el aceite que tiene en su mano el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, el pulgar de su mano derecha y el de su pie derecho, en el lugar donde puso la sangre de la víctima de reparación. (Levítico 14, 28)

  • Derramará el resto del aceite que le quede en la mano sobre la cabeza del que se purifica, haciendo expiación por él ante Yahveh. (Levítico 14, 29)

  • es decir, lo que alcanzan sus recursos, uno como sacrificio por el pecado, y otro como holocausto, además de la oblación. De este modo el sacerdote hará expiación ante Yahveh por aquel que se purifica. (Levítico 14, 31)

  • Todo el que toca un muerto, un cadáver humano, y no se purifica, mancha la Morada de Yahveh; ese individuo será extirpado de Israel, porque las aguas lustrales no han corrido sobre él: es impuro; su impureza sigue sobre él. (Números 19, 13)

  • Levántate, purifica al pueblo y diles: Purificaos para mañana, porque así dice Yahveh, el Dios de Israel: El anatema está dentro de ti, Israel; no podrás mantenerte delante de tus enemigos hasta que estirpéis el anatema de entre vosotros. (Josué 7, 13)

  • La limosna libra de la muerte y purifica de todo pecado. Los limosneros tendrán larga vida. (Tobías 12, 9)

  • Hay, sí, para la plata un venero, para el oro un lugar donde se purifica. (Job 28, 1)


“Onde não há obediência, não há virtude. Onde não há virtude, não há bem, não há amor; e onde não há amor, não há Deus; e sem Deus não se chega ao Paraíso. Tudo isso é como uma escada: se faltar um degrau, caímos”. São Padre Pio de Pietrelcina