Encontrados 22 resultados para: abandono

  • Abandonó Saúl la persecución de David y marchó al encuentro de los filisteos. Por eso se llamó aquel lugar «Peña de la Separación.» (I Samuel 23, 28)

  • David le preguntó: «¿A quién perteneces y de dónde eres?» Respondió: «Soy un muchacho egipcio, esclavo de un amalecita, pero mi dueño me abandonó porque me puse enfermo hace tres días. (I Samuel 30, 13)

  • Pero él abandonó el consejo que los ancianos le aconsejaron y pidió consejo a los jóvenes que se habían criado con él y estaban a su servicio. (I Reyes 12, 8)

  • El abandonó los bueyes, corrió tras de Elías y le dijo: «Déjame ir a besar a mi padre y a mi madre y te seguiré.» Le respondió: «Anda, vuélvete, pues ¿qué te he hecho?» (I Reyes 19, 20)

  • Cuando el rey pasaba clamó al rey y dijo: «Tu siervo había llegado al centro de la batalla cuando uno abandonó las filas y me trajo un hombre y me dijo: "Custodia a este hombre; si llega a faltar, tu vida responderá por la suya, o pagarás un talento de plata." (I Reyes 20, 39)

  • Preguntó el rey a la mujer y ella se lo relató; el rey puso un eunuco a disposición de la mujer diciendo: «Que se le devuelva todo lo suyo, con todos los productos del campo, desde el día en que ella abandonó la tierra hasta ahora.» (II Reyes 8, 6)

  • Abandonó a Yahveh, Dios de sus padres, y no anduvo por el camino de Yahveh. (II Reyes 21, 22)

  • Pero él abandonó el consejo que los ancianos le aconsejaron y pidió consejo a los jóvenes que se habían criado con él y estaban a su servicio. (II Crónicas 10, 8)

  • Cuando Roboam hubo consolidado y afianzado el reino, abandonó la Ley de Yahveh y con él todo Israel. (II Crónicas 12, 1)

  • El profeta Semaías vino a Roboam y a los jefes de Judá que se habían reunido en Jerusalén para hacer frente a Sosaq, y les dijo: «Así dice Yahveh: Vosotros me habéis abandonado, y por esto también yo os abandono en manos de Sosaq.» (II Crónicas 12, 5)

  • cuando los príncipes de Babilonia enviaron embajadores para investigar la señal maravillosa ocurrida en el país, Dios le abandonó para probarle y descubrir todo lo que tenía en su corazón. (II Crónicas 32, 31)

  • abandonó la morada de Silo, la tienda en que habitaba entre los hombres. (Salmos 78, 60)


“Viva feliz. Sirva ao Senhor alegremente e com o espírito despreocupado.” São Padre Pio de Pietrelcina