Encontrados 478 resultados para: columna de fuego

  • ponedles fuego y mañana les echaréis incienso ante Yahveh. Aquel a quien elija Yahveh, será el consagrado; ¡esto ya pasa de la raya, hijos de Leví!» (Números 16, 7)

  • Tomaron cada uno su incensario, le pusieron fuego, le echaron incienso y se presentaron a la entrada de la Tienda del Encuentro, lo mismo que Moisés y Aarón. (Números 16, 18)

  • Brotó fuego de Yahveh, que devoró a los 250 hombres que habían ofrecido el incienso. (Números 16, 35)

  • «Di a Eleazar, hijo del sacerdote Aarón, que saque los incensarios de entre las cenizas y esparza el fuego a distancia, (Números 17, 2)

  • Dijo entonces Moisés a Aarón: «Toma el incensario, ponle fuego del que hay sobre el altar, echa incienso y vete rápidamente donde la comunidad a expiar por ellos. Porque ha salido ya la Cólera de la presencia de Yahveh y ha comenzado la Plaga.» (Números 17, 11)

  • Porque fuego ha salido de Jesbón, una llama de la ciudad de Sijón: ha devorado Ar Moab, ha tragado las alturas del Arnón. (Números 21, 28)

  • Su posteridad ha perecido, desde Jesbón hasta Dibón, y hemos dado fuego desde Nofaj hasta Mádaba. (Números 21, 30)

  • La tierra abrió su boca y los tragó a ellos y a Coré, cuando el fuego devoró a 250 hombres, para que sirvieran de escarmiento. (Números 26, 10)

  • Nadab y Abihú murieron al ofrecer fuego profano delante de Yahveh. (Números 26, 61)

  • Dieron fuego a todas las ciudades en que habitaban y a todos sus campamentos. (Números 31, 10)

  • todo lo que puede pasar por el fuego, lo pasaréis por el fuego y quedará puro. Pero será purificado con las aguas lustrales. Pero todo lo que no pueda pasar por el fuego lo pasaréis por las aguas.» (Números 31, 23)

  • ¡Y ahora vosotros os alzáis a imitación de vuestros padres, comos retoño de hombres pecadores, para atizar más el fuego de la ira de Yahveh contra Israel! (Números 32, 14)


“A sua função é tirar e transportar as pedras, e arrancar os espinhos. Jesus é quem semeia, planta, cultiva e rega. Mas seu trabalho também é obra de Jesus. Sem Ele você nada pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina