Encontrados 31 resultados para: costa

• Y si la levanto, como un león me das caza, y repites tus proezas a mi costa. (Job 10, 16)

• ¡Vergüenza y confusión caigan a una sobre los que se ríen de mi mal; queden cubiertos de vergüenza y de ignominia los que a mi costa medran! (Salmos 35, 26)

• Por su parte el rey Tolomeo se hizo dueño de las ciudades de la costa hasta Seleucia Marítima y meditaba planes malvados contra Alejandro. (I Macabeos 11, 8)

• El comienzo de la sabiduría es: adquiere la sabiduría, a costa de todos tus bienes adquiere la inteligencia. (Proverbios 4, 7)

• Inmola a un hijo a los ojos de su padre quien ofrece víctima a costa de los bienes de los humildes. (Eclesiástico 34, 20)

• Y dirán los habitantes de esta costa aquel día: «Ahí tenéis en qué ha parado la esperanza nuestra, adonde acudíamos en busca de auxilio para librarnos del rey de Asur. Pues ¿cómo nos escaparemos nosotros? (Isaías 20, 6)

• Quedad mudos, habitantes de la costa, mercaderes de Sidón, cuyos viajantes atravesaban el mar (Isaías 23, 2)

• Pasad a Tarsis, ululad, habitantes de la costa: (Isaías 23, 6)

• el que hace merced a millares, que se cobra la culpa de los padres a costa de los hijos que les suceden, el Dios grande, el Fuerte, cuyo nombre es Yahveh Sebaot, (Jeremías 32, 18)

• Aún no había dado media vuelta cuando le dijo: «Vuelve adonde Godolías, hijo de Ajicam, hijo de Safán, a quien el rey de Babilonia ha encargado de las ciudades de Judá, y quédate a vivir con él entre esta gente. En suma, vete adonde mejor te acomode.» Luego el jefe de la guardia le proporcionó algunos víveres y ayuda de costa y le despidió. (Jeremías 40, 5)

• Así dice el Señor Yahveh: Por haber batido palmas y haber pataleado, por haberte alegrado, con todo tu desprecio y animosidad, a costa de la tierra de Israel, (Ezequiel 25, 6)

• Subirás contra mi pueblo Israel como un nublado que recubre la tierra. Será al fin de los días; yo te haré venir entonces contra mi tierra para que las naciones me conozcan, cuando yo manifieste mi santidad a sus ojos, a costa tuya, Gog. (Ezequiel 38, 16)