Encontrados 454 resultados para: fuego

  • el querubín alargó su mano de entre los querubines hacia el fuego que había en medio de los querubines, lo tomó y lo puso en las manos del hombre vestido de lino. Este lo tomó y salió. (Ezequiel 10, 7)

  • No, se tira al fuego para que lo devore: el fuego devora los dos cabos; el centro está quemado, ¿sirve aún para hacer algo? (Ezequiel 15, 4)

  • Si ya, cuando estaba intacto, no se podía hacer nada con él, ¡cuánto menos, cuando lo ha devorado el fuego y lo ha quemado, se podrá hacer con él alguna cosa! (Ezequiel 15, 5)

  • Por eso, así dice el Señor Yahveh: Lo mismo que el leño de la vid, entre los árboles del bosque, al cual he arrojado al fuego para que lo devore, así he entregado a los habitantes de Jerusalén. (Ezequiel 15, 6)

  • He vuelto mi rostro contra ellos. Han escapado al fuego, pero el fuego los devorará. Y sabréis que yo soy Yahveh, cuando vuelva mi rostro contra ellos. (Ezequiel 15, 7)

  • que inmolaste también a mis hijos y los entregaste haciéndoles pasar por el fuego en su honor? (Ezequiel 16, 21)

  • prenderán fuego a tus casas y harán justicia de ti, a la vista de una multitud de mujeres; yo pondré fin a tus prostituciones, y no volverás a dar salario de prostituta. (Ezequiel 16, 41)

  • Pero ha sido arrancada con furor, tirada por tierra; el viento del este ha agostado su fruto; ha sido rota, su rama fuerte se ha secado, la ha devorado el fuego. (Ezequiel 19, 12)

  • Ha salido fuego de su rama, ha devorado sus sarmientos y su fruto. No volverá a tener su rama fuerte, su cetro real. Esto es una elegía; y de elegía sirvió. (Ezequiel 19, 14)

  • y los contaminé con sus propias ofrendas, haciendo que pasaran por el fuego a todo primogénito, a fin de infundirles horror, para que supiesen que yo soy Yahveh. (Ezequiel 20, 26)

  • presentando vuestras ofrendas, haciendo pasar a vuestros hijos por el fuego; os contamináis con todas vuestras basuras, hasta el día de hoy, ¿y yo voy a dejarme consultar por vosotros, casa de Israel? Por mi vida, oráculo del Señor Yahveh, que no me dejaré consultar por vosotros. (Ezequiel 20, 31)

  • Dirás al bosque del Négueb: Escucha la palabra de Yahveh. Así dice el Señor Yahveh: He aquí que yo te prendo fuego, que devorará todo árbol verde y todo árbol seco; será una llama que no se apagará, y arderá todo, desde el Négueb hasta el Norte. (Ezequiel 21, 3)


“Seja paciente nas aflições que o Senhor lhe manda.” São Padre Pio de Pietrelcina