Encontrados 23 resultados para: memorial

  • Ofrece incienso y memorial de flor de harina, haz pingües ofrendas según tus medios. (Eclesiástico 38, 11)

  • Le puso alrededor granadas, y campanillas de oro, bien de ellas todo en torno, para que tintinearan al andar y resonaran bien por todo el Templo, como memorial para los hijos de su pueblo; (Eclesiástico 45, 9)

  • piedras preciosas, grabadas como sellos, en engaste de oro, obra de joyero, para memorial por la escritura grabada, según el número de las tribus de Israel; (Eclesiástico 45, 11)

  • Le eligió entre todos los vivientes para presentar la ofrenda al Señor, el incienso y el aroma en memorial, y hacer expiación por el pueblo. (Eclesiástico 45, 16)

  • Entonces prorrumpían en gritos los hijos de Aarón, tocaban con sus trompetas de metal batido, hacían oír su sonido imponente, como memorial delante del Altísimo. (Eclesiástico 50, 16)

  • Detrás de la puerta y de la jamba pusiste tu memorial. Sí, te desnudaste, subiste, y no conmigo, a tu lecho, y lo extendiste. Llegaste a un acuerdo con aquellos con quienes te plugo acostarte, mirando el monumento. (Isaías 57, 8)

  • Se inmola un buey, se abate un hombre, se sacrifica una oveja, se desnuca un perro, se ofrece en oblación sangre de cerdo, se hace un memorial de incienso, se bendice a los ídolos. Ellos mismos eligieron sus propios caminos y en sus monstruos abominables halló su alma complacencia. (Isaías 66, 3)

  • ¡Animo, pueblo mío, memorial de Israel! (Baruc 4, 5)

  • Será la corona para Jelday, Tobías y Yedaías, y para el hijo de Sefanías, un memorial de gracia en el Templo de Yahveh. (Zacarías 6, 14)

  • Entonces los que temen a Yahveh se hablaron unos a otros. Y puso atención Yahveh y oyó; y se escribió ante él un libro memorial en favor de los que temen a Yahveh y piensan en su Nombre. (Malaquías 3, 16)

  • El le miró fijamente y lleno de espanto dijo: «¿Qué pasa, señor?» Le respondió: «Tus oraciones y tus limosnas han subido como memorial ante la presencia de Dios. (Hechos 10, 4)


“Onde não há obediência, não há virtude. Onde não há virtude, não há bem, não há amor; e onde não há amor, não há Deus; e sem Deus não se chega ao Paraíso. Tudo isso é como uma escada: se faltar um degrau, caímos”. São Padre Pio de Pietrelcina