Encontrados 117 resultados para: oriente

  • Y en la otra parte del Jordán, frente a Jericó, al oriente del Jordán, de la tribu de Rubén: Béser en el desierto, con sus ejidos, y Yahsa con sus ejidos, (I Crónicas 6, 63)

  • Tenían propiedades y habitaban en Betel y sus aldeas anejas, en Naarán hacia el oriente, en Guézer y sus aldeas anejas hacia el occidente, en Siquem y sus aldeas hasta Ayyá y sus aldeas. (I Crónicas 7, 28)

  • y están hasta el presente junto a la puerta del rey, al oriente. Estos son los porteros del campamento de los hijos de Leví: (I Crónicas 9, 18)

  • Había porteros a los cuatro vientos: al oriente, al occidente, al norte y al mediodía. (I Crónicas 9, 24)

  • Estos fueron los que atraversaron el Jordán en el mes primero, cuando suele desbordarse por todas sus riberas, y pusieron en fuga a todos los habitantes de los valles, a oriente y occidente. (I Crónicas 12, 16)

  • Al oriente seis por día, al norte cuatro por día, al mediodía cuatro por día y en los almacenes de dos en dos; (I Crónicas 26, 17)

  • y todos los levitas cantores, Asaf, Hemán y Yedutún, con sus hijos y hermanos, vestidos de lino fino, estaban de pie al oriente del altar, tocando címbalos, salterios y cítaras, y con ellos 120 sacerdotes que tocaban las trompetas; (II Crónicas 5, 12)

  • hasta la puerta de las Aguas hacia Oriente y hasta delante de la torre en saliente. (Nehemías 3, 26)

  • A la altura de la puerta de la Fuente, subieron a derecho por la escalera de la Ciudad de David, por encima de la muralla, y por la subida de la Casa de David, hasta la puerta del Agua, al Oriente. (Nehemías 12, 37)

  • Tenía también 7.000 ovejas, 3.000 camellos, quinientas yuntas de bueyes, quinientas asnas y una servidumbre muy numerosa. Este hombre era, pues, el más grande de todos los hijos de Oriente. (Job 1, 3)

  • De su fin se estremece el Occidente, y el Oriente queda preso de terror. (Job 18, 20)

  • Si voy hacia el oriente, no está allí; si al occidente, no le advierto. (Job 23, 8)


“Tente percorrer com toda a simplicidade o caminho de Nosso Senhor e não se aflija inutilmente.” São Padre Pio de Pietrelcina