Encontrados 203 resultados para: trabajo en madera

  • No se pedían cuentas a los hombres en cuyas manos se ponía el dinero para que lo dieran a los que hacían el trabajo, porque trabajaban con fidelidad. (II Reyes 12, 16)

  • y han entregado sus dioses al fuego, porque ellos no son dioses, sino hechuras de mano de hombre, de madera y de piedra, y por eso han sido aniquilados. (II Reyes 19, 18)

  • y madera de cedro inmumerable, pues los sidonios y los tirios trajeron a David madera de cedro en abundancia. (I Crónicas 22, 4)

  • Y tienes a mano muchos obreros, canteros, artesanos en piedra y en madera, expertos en toda clase de obras. (I Crónicas 22, 15)

  • Con todas mis fuerzas he preparado, con destino a la Casa de mi Dios, el oro para los objetos de oro, la plata para los de plata, el bronce para los de bronce, el hierro para los de hierro, y la madera para los de madera; piedras de ónice y de engaste, piedras brillantes y de varios colores, toda suerte de piedras preciosas y piedras de alabastro en abundancia. (I Crónicas 29, 2)

  • Envíame también madera de cedro, de ciprés y algummim del Líbano; pues bien sé que tus siervos saben talar los árboles del Líbano, y mis siervos trabajarán con tus siervos, (II Crónicas 2, 7)

  • para prepararme madera en abundancia; pues la Casa que voy a edificar ha de ser grande y maravillosa. (II Crónicas 2, 8)

  • es hijo de una danita, y su padre es de Tiro. Sabe trabajar el oro, la plata, el bronce, el hierro, la piedra y la madera, la púrpura escarlata, la púrpura violeta, el lino fino y el carmesí. Sabe también hacer toda clase de grabados y ejecutar cualquier obra que se le proponga, a una con tus artífices y los artífices de mi señor David, tu padre. (II Crónicas 2, 13)

  • y por nuestra parte cortaremos del Líbano toda la madera que necesites y te la llevaremos en balsas, por mar, hasta Joppe, y luego tú mandarás que la suban a Jerusalén.» (II Crónicas 2, 15)

  • Revistió la Sala Grande de madera de ciprés y la recubrió de oro fino, haciendo esculpir en ella palmas y cadenillas. (II Crónicas 3, 5)

  • Los siervos de Juram y los siervos de Salomón, que habían traído oro de Ofir, trajeron también madera de algummim y piedras preciosas. (II Crónicas 9, 10)

  • Con la madera de algummim hizo el rey entarimados para la Casa de Yahveh y la casa del rey, cítaras y salterios para los cantores. No se había visto nunca en la tierra de Judá madera semejante. (II Crónicas 9, 11)


“A caridade é o metro com o qual o Senhor nos julgará.” São Padre Pio de Pietrelcina