Encontrados 709 resultados para: Corazón

  • Te harán bajar a la fosa y morirás atravesado en el corazón del mar. (Ezequiel 28, 8)

  • Pues bien, esto dice el Señor Dios: Por haberse estirado en su altura levantando su copa hasta las nubes, y haberse engreído su corazón por su grandeza, (Ezequiel 31, 10)

  • Entristeceré el corazón de muchos pueblos cuando lleve a tus cautivos por las naciones, a tierras que no conoces. (Ezequiel 32, 9)

  • Vienen a ti en masa, mi pueblo se sienta delante de ti, escucha tus palabras; pero luego no las ponen en práctica, porque tienen en su boca la mentira y su corazón va tras la ganancia injusta. (Ezequiel 33, 31)

  • Esto dice el Señor Dios: Lo juro en el ardor de mi cólera; a los restos de las naciones, a Edón entero me dirijo, a los que se han atribuido la posesión de mi tierra, con la alegría en el corazón y el desprecio en el alma para saquearla y expoliarla. (Ezequiel 36, 5)

  • Os daré un corazón nuevo y os infundiré un espíritu nuevo; quitaré de vuestro cuerpo el corazón de piedra y os daré un corazón de carne. (Ezequiel 36, 26)

  • Iré a saquear, a pillar botín, a extender la mano sobre ruinas repobladas y sobre un pueblo congregado de entre las naciones, que está entregado a reponer el ganado y la hacienda y que habita en el corazón de la tierra. (Ezequiel 38, 12)

  • habéis introducido extranjeros, incircuncisos de corazón e incircuncisos de cuerpo en mi santuario para que profanen mi templo, mientras vosotros me ofrecíais mi pan, grasa y sangre, quebrantando así mi alianza con todas vuestras monstruosidades. (Ezequiel 44, 7)

  • Esto dice el Señor Dios: Ningún extranjero, incircunciso de corazón e incircunciso de cuerpo, entrará en mi santuario; ninguno de los extranjeros que viven entre los israelitas. (Ezequiel 44, 9)

  • En cuanto a mí, este misterio me ha sido revelado no porque yo posea una sabiduría superior a la de todos los hombres, sino con el solo objeto de indicar la interpretación al rey y de que tú comprendieras los pensamientos de tu corazón. (Daniel 2, 30)

  • y alcanzar tu misericordia. Pero tenemos un corazón contrito y un alma humillada; (Daniel 3, 39)

  • Y ahora te seguimos de todo corazón, te tememos y buscamos tu rostro. (Daniel 3, 41)


“Rezai e continuai a rezar para não ficardes entorpecidos”. São Padre Pio de Pietrelcina