Encontrados 90 resultados para: Raza

  • Y tú, Ajior, mercenario amonita, que has pronunciado estas palabras en un día aciago para ti, no verás más mi rostro hasta que no me haya vengado de esta raza que escapó de Egipto. (Judit 6, 5)

  • Judit le respondió: "¡Escuchadme! Voy a realizar una hazaña que se transmitirá de generación en generación a los hijos de nuestra raza. (Judit 8, 32)

  • Holofernes replicó: "Si se te acaban tus provisiones, ¿cómo nos arreglaremos para procurarte otras, pues no hay entre nosotros nadie de tu raza?". (Judit 12, 3)

  • Que Dios te colme de bienes para tu exaltación eterna, pues viendo abatida nuestra raza, no has perdonado la vida, antes fuiste su socorro en la ruina, portándote con rectitud ante Dios". Y todo el pueblo respondió: "Así sea. Así sea". (Judit 13, 20)

  • Al verla, todos a una la ensalzaron así: "Tú eres la gloria de Jerusalén, el honor de Israel, el orgullo de nuestra raza. (Judit 15, 9)

  • ¡Ay de las naciones que se enfrentan a mi raza! El Señor omnipotente las castigará en el día del juicio, pondrá fuego y gusanos en sus cuerpos y llorarán atormentados para siempre". (Judit 16, 17)

  • Y como le habían hablado de la raza de Mardoqueo, tuvo en poco meterse sólo con él y decidió exterminar a todos los judíos que había en el reino de Asuero. (Ester 3, 6)

  • Refirió a su mujer, Zeres, y a todos sus amigos lo que había sucedido. Ellos le dijeron: "Comienzas a declinar ante Mardoqueo; si pertenece a la raza judía, no podrás nada contra él, sino que caerás ante él". (Ester 6, 13)

  • Pues ¿cómo podría yo ver las desventuras que esperan a mi pueblo y la desaparición de mi raza?". (Ester 8, 6)

  • Está escrito cómo el judío Mardoqueo fue el segundo después del rey y fue estimado entre los judíos y querido por la muchedumbre de sus hermanos. Él procuró el bien de su pueblo y se preocupó del bienestar de su raza. (Ester 10, 3)

  • Utilizó toda clase de argucias para exterminar a Mardoqueo, que fue nuestro salvador y nuestro constante bienhechor; a Ester, la irreprochable reina de nuestro imperio, y a toda su raza. (Ester 16, 13)

  • Pero a su hora temblarán de espanto, pues el Señor está con la raza de los justos; (Salmos 14, 5)


“Para consolar uma alma na sua dor, mostre-lhe todo o bem que ela ainda pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina