Encontrados 379 resultados para: enemigos
Pero los enemigos, al saber que Jonatán velaba con los suyos dispuestos a dar batalla, tuvieron miedo y se desanimaron; por eso encendieron fuego en su campamento y huyeron. (I Macabeos 12, 28)
Desaparecieron del país sus enemigos, y los reyes eran derrotados. (I Macabeos 14, 13)
Pues tanto él como sus hijos y la casa de sus padres han demostrado valentía, han luchado contra los enemigos de Israel y nos han devuelto la libertad". Grabaron una inscripción en placas de bronce y las colgaron en columnas en el monte Sión. (I Macabeos 14, 26)
En las frecuentes batallas libradas en nuestro país, Simón, hijo de Matatías, de la familia de Yoarib, y sus hermanos, han expuesto con peligro sus vidas y han resistido a los enemigos de su nación para salvar el templo y la ley, conquistando gloria imperecedera para su nación. (I Macabeos 14, 29)
Los enemigos de los judíos quisieron entonces invadir su país para devastarlo y poner las manos en su templo. (I Macabeos 14, 31)
Fortificó también a Jafa, junto al mar, y a Guézer, en los límites de Asdod, habitada antes por enemigos, y estableció allí colonos judíos, dotándolos de cuanto era necesario. (I Macabeos 14, 34)
Nos es grato escribir a los reyes y a los pueblos que no les hagan mal, que no les declaren la guerra ni a ellos, ni a sus ciudades, ni a su país, y que no pacten con sus enemigos. (I Macabeos 15, 19)
Simón le respondió: "No hemos ocupado tierra extranjera ni retenemos nada de nadie, sino la herencia de nuestros padres, que en un tiempo injustamente nos fue arrebatada por nuestros enemigos. (I Macabeos 15, 33)
Entonces Simón llamó a sus dos hijos mayores y les dijo: "Yo, mis padres y la casa de mi padre hemos luchado desde nuestra juventud hasta hoy contra los enemigos de Israel y hemos conseguido muchas veces liberar a Israel. (I Macabeos 16, 2)
Juan, con sus tropas, acampó frente a los enemigos, y al notar que sus hombres tenían miedo de cruzar el torrente, lo cruzó él el primero; al verlo, sus hombres lo siguieron. (I Macabeos 16, 6)
y muchos se refugiaron en las torres de la campiña de Asdod. Juan incendió la ciudad y murieron unos dos mil enemigos. Juan regresó a Judea sano y salvo. (I Macabeos 16, 10)
Precisamente por esto les sobrevino una gran calamidad, pues aquellos mismos cuyas costumbres querían imitar en todo vinieron a ser sus enemigos y tiranos. (II Macabeos 4, 16)