Encontrados 89 resultados para: entrañas
En medio del asedio y de la angustia a que te habrá reducido el enemigo, tú comerás el fruto de tus entrañas, la carne de tus hijos y tus hijas, que el Señor, tu Dios, te haya dado. (Deuteronomio 28, 53)
y él te hará prosperar en todas tus empresas, en el fruto de tus entrañas, en el fruto de tus ganados y en el producto de tu tierra. El Señor se complacerá de nuevo en tu prosperidad, como se había complacido en la de tus padres, (Deuteronomio 30, 9)
pues cuando llegues al término de tus días y descanses con tus padres, haré surgir un descendiente tuyo, que saldrá de tus entrañas, y lo confirmaré en el reino. (II Samuel 7, 12)
David dijo a Abisay y a todos sus servidores: "Mirad, si mi hijo, salido de mis entrañas, busca mi vida, con mayor razón lo hará este hijo de Benjamín. Dejadle maldecir, si se lo ha ordenado el Señor. (II Samuel 16, 11)
Amasá no se fijó en la espada que Joab tenía en la mano, y éste se la clavó en el vientre, esparció sus entrañas en la tierra y, sin repetirle el golpe, murió. Entonces Joab y su hermano Abisay salieron en persecución de Sebá, hijo de Bicrí. (II Samuel 20, 10)
Entonces la madre del niño vivo, sintiendo conmoverse sus entrañas por su hijo, dijo: "¡Por favor, señor mío! Dale a ella el niño vivo, pero matarle... ¡no, que no le maten!". La otra, en cambio, decía: "Que no sea ni para mí ni para ti; que lo partan". (I Reyes 3, 26)
Pero no lo construirás tú, sino un hijo tuyo salido de tus entrañas será el que lo construya. (I Reyes 8, 19)
pues cuando llegues al término de tus días y descanses con tus padres haré surgir un descendiente tuyo, que saldrá de tus entrañas y lo confirmaré en el reino. (I Crónicas 17, 11)
Pero no lo construirás tú, sino un hijo tuyo salido de tus entrañas será el que lo construya. (II Crónicas 6, 9)
Oh, ¿por qué me hiciste salir de las entrañas? Hubiera muerto y no me hubiera visto ojo alguno. (Job 10, 18)
Sus flechas me acorralan, traspasa mis entrañas sin piedad y derrama por tierra mi hiel. (Job 16, 13)
Mi aliento repele a mi mujer, fétido soy para los hijos de mis entrañas. (Job 19, 17)