Encontrados 207 resultados para: envió

  • Isbaal envió a quitársela a su marido, Paltiel, hijo de Lais. (II Samuel 3, 15)

  • Joab, al salir de estar con David, envió mensajeros en persecución de Abner, que le hicieron volver desde la cisterna de Sirá, sin saberlo David. (II Samuel 3, 26)

  • Jirán, rey de Tiro, envió mensajeros a David con madera de cedro, albañiles y carpinteros para que le construyeran un palacio. (II Samuel 5, 11)

  • envió a su hijo Hadorán al rey David para saludarlo y felicitarlo por haber atacado y haber vencido a Hadadézer, pues Tou estaba en guerra con Hadadézer. Hadorán llevaba consigo objetos de plata, de oro y de bronce, que (II Samuel 8, 10)

  • David se dijo: "Yo trataré con benevolencia a Janún, hijo de Najás, como su padre me trató a mí". David le envió una embajada de pésame por la muerte de su padre. Pero cuando los servidores de David llegaron a la tierra de Amón, (II Samuel 10, 2)

  • Al año siguiente, por el tiempo en que suelen los reyes salir a campaña, David envió a Joab, a sus oficiales y a todo Israel a devastar a los amonitas y a sitiar a Rabá. David se quedó en Jerusalén. (II Samuel 11, 1)

  • Entonces David envió este mensaje a Joab: "Envíame a Urías, el hitita". Y Joab envió a Urías a David. (II Samuel 11, 6)

  • El Señor envió al profeta Natán a ver a David. Se presentó a él y le dijo: "En la ciudad había dos hombres, uno rico y otro pobre. (II Samuel 12, 1)

  • envió mensajeros a David para decirle: "He atacado a Rabá y me he apoderado de la ciudad de las aguas. (II Samuel 12, 27)

  • Y David eligió la peste. Era el tiempo de la siega del trigo. Y el Señor envió la peste desde la mañana hasta el tiempo establecido; y murieron, desde Dan hasta Berseba, setenta mil hombres del pueblo. (II Samuel 24, 15)

  • Jirán, rey de Tiro, al enterarse de que Salomón había sido ungido rey en lugar de su padre, le envió una embajada, pues Jirán había sido amigo de David toda su vida. (I Reyes 5, 15)

  • Roboán envió a Adorán, el intendente de las prestaciones personales; pero los israelitas le mataron a pedradas. Y el propio Roboán tuvo que apresurarse a subir a su carro y huir a Jerusalén. (I Reyes 12, 18)


“Deus é servido apenas quando é servido de acordo com a Sua vontade.” São Padre Pio de Pietrelcina