Encontrados 36 resultados para: fieras

  • Y si yo hiciese venir contra este país animales dañinos que lo asolaran y redujeran a un desierto que nadie se atreviera a cruzar por miedo a las fieras, (Ezequiel 14, 15)

  • Les dirás lo siguiente: Esto dice el Señor Dios: Por mi vida que los que habitan entre las ruinas morirán a espada, los que andan por el campo los entregaré como pasto a las fieras y los que están en las fortalezas y en las cuevas morirán de peste. (Ezequiel 33, 27)

  • Y ahora andan dispersas, por falta de pastor, presa de todas las fieras del campo; (Ezequiel 34, 5)

  • Por mi vida, dice el Señor Dios, que por haber sido mi rebaño expuesto al pillaje y mis ovejas pasto de todas las fieras del campo por falta de pastor, por no haber cuidado mis pastores mi ganado y haberse en cambio apacentado a sí mismos en lugar de mi rebaño, (Ezequiel 34, 8)

  • No volverán a ser presa de las gentes ni los devorarán las fieras del país, habitarán seguros sin que nadie los espante. (Ezequiel 34, 28)

  • Sobre los montes de Israel caerás juntamente con tus huestes y los pueblos que te acompañan, porque te he destinado como pasto a toda clase de aves de rapiña y a las fieras salvajes. (Ezequiel 39, 4)

  • Fieras y ganados, bendecid al Señor, alabadlo y ensalzadlo eternamente. (Daniel 3, 81)

  • Caeré sobre ellos como una osa privada de sus cachorros; desgarraré su corazón, los devoraré como un león, y las fieras del campo los harán pedazos. (Oseas 13, 8)

  • Entonces el resto de Jacob será entre las naciones, en medio de la multitud de los pueblos, como el león entre las fieras de la selva, como el leoncillo entre los rebaños de ganado menor, que pasa, pisotea y arrebata sin que nadie pueda arrancar su presa. (Miqueas 5, 7)

  • Ésta es la ciudad alegre que vivía confiada y decía en su corazón: "¡Yo, y sólo yo!". ¡Cómo ha quedado desolada! ¡Una guarida de fieras! Todo el que pasa junto a ella silba y agita la mano. (Sofonías 2, 15)

  • Si luché con las fieras en Éfeso con miras humanas, ¿de qué me sirvió? Si los muertos no resucitan, comamos y bebamos, que mañana moriremos. (I Corintios 15, 32)

  • Y apareció un caballo pajizo, cuyo jinete se llamaba muerte (el abismo le acompañaba). Le fue dado poder sobre la cuarta parte de la tierra, para matar con la espada, con el hambre, con la peste y con las fieras de la tierra. (Apocalipsis 6, 8)


“Há duas razões principais para se orar com muita satisfação: primeiro para render a Deus a honra e a glória que Lhe são devidas. Segundo, para falar com São Padre Pio de Pietrelcina