Encontrados 48 resultados para: lágrimas

  • Y, volviéndose hacia la mujer, dijo a Simón: "¿Ves a esta mujer? Yo entré en tu casa y no me diste agua para los pies; ella, en cambio, ha bañado mis pies con sus lágrimas y los ha enjugado con sus cabellos. (Lucas 7, 44)

  • sirviendo al Señor con toda humildad y con lágrimas, en medio de las pruebas que me han sobrevenido por las asechanzas de los judíos. (Hechos 20, 19)

  • Por lo cual, estad alerta y recordad que durante tres años no he cesado noche y día de aconsejar con lágrimas en los ojos a cada uno de vosotros. (Hechos 20, 31)

  • Os escribí esa carta profundamente acongojado y angustiado, y hasta con lágrimas en los ojos, no para causaros tristeza, sino para manifestaros el amor tan grande que os tengo. (II Corintios 2, 4)

  • Y no sólo con su llegada, sino con el ánimo que vosotros le habíais infundido; me habló de vuestro deseo de verme, de vuestras lágrimas, de vuestro interés por mí; así que me alegré mucho. (II Corintios 7, 7)

  • Pues hay muchos entre vosotros, de quienes muchas veces os dije, y ahora tengo que repetirlo con lágrimas en los ojos, que son enemigos de la cruz de Cristo; (Filipenses 3, 18)

  • Cuando me acuerdo de tus lágrimas, me entran ganas de ir a verte para llenarme de alegría, (II Timoteo 1, 4)

  • Él, en los días de su vida mortal, presentó con gran clamor y lágrimas oraciones y súplicas al que podía salvarle de la muerte, y fue escuchado en atención a su obediencia; (Hebreos 5, 7)

  • Sabéis bien que, como consecuencia, cuando quiso recibir la bendición, le fue negada, y no logró cambiar lo que había hecho, aunque lo intentó con lágrimas. (Hebreos 12, 17)

  • Obedeced a vuestros jefes y estadles sumisos, porque ellos cuidan de vuestras vidas, de las cuales deberán dar cuenta, para que lo hagan con alegría y no con lágrimas, lo que no os beneficiaría nada. (Hebreos 13, 17)

  • porque el ángel que está en medio del trono será su pastor y los conducirá a las fuentes de las aguas de la vida; y Dios enjugará todas las lágrimas de sus ojos". (Apocalipsis 7, 17)

  • Enjugará las lágrimas de sus ojos y no habrá más muerte, ni luto, ni llanto, ni pena, porque el primer mundo ha desaparecido". (Apocalipsis 21, 4)


“Meu Deus, perdoa-me. Nunca Te ofereci nada na minha vida e, agora, por este pouco que estou sofrendo, em comparação a tudo o que Tu sofreste na Cruz, eu reclamo injustamente!” São Padre Pio de Pietrelcina