Encontrados 125 resultados para: pasar

  • Recubrieron los tablones de oro, hicieron también de oro sus anillos para pasar por ellos las barras, asimismo recubiertas de oro. (Exodo 36, 34)

  • Fundió cuatro anillos para las cuatro aristas del enrejado de bronce para pasar por ellos las barras. (Exodo 38, 5)

  • pero no podrá pasar detrás del velo ni acercarse al altar, pues tiene un defecto y no debe profanar mi santuario: yo, el Señor, que los santifico". (Levítico 21, 23)

  • Los israelitas le contestaron: "Subiremos por el camino trillado y, si bebemos de tus aguas, nosotros o nuestros ganados, te daremos el precio de ellas. Es cosa de nada: simplemente pasar a pie". (Números 20, 19)

  • El ángel del Señor se adelantó y se puso otra vez en un lugar tan estrecho que no había espacio para pasar ni por un lado ni por otro. (Números 22, 26)

  • "Las hijas de Selofjad tienen razón. Les darás, pues, una propiedad en herencia, como a los hermanos de su padre, y harás pasar a ellas la herencia de su padre. (Números 27, 7)

  • Y dirás a los israelitas: Si un hombre muere sin haber dejado hijos, haréis pasar la herencia a su hija. (Números 27, 8)

  • Si tus siervos han hallado gracia a tus ojos, danos en propiedad esta tierra y no nos hagas pasar el Jordán". (Números 32, 5)

  • Las herencias no podrán pasar de una tribu a otra; cada una de las tribus de los israelitas permanecerá vinculada a su heredad". (Números 36, 9)

  • Da esta orden al pueblo: Vais a pasar a través del territorio de vuestros hermanos, los hijos de Esaú, que habitan en Seír. Os tendrán miedo; pero tened cuidado; (Deuteronomio 2, 4)

  • A precio de plata me venderás los víveres que coma, y por dinero me darás el agua que beba. Permíteme sólo pasar a pie, (Deuteronomio 2, 28)

  • Pero Sijón, rey de Jesbón, no nos permitió pasar por sus dominios, pues el Señor, tu Dios, había hecho inflexible su espíritu y había endurecido su corazón, con el fin de ponerlo en tus manos, como aún lo está hoy. (Deuteronomio 2, 30)


“Temos muita facilidade para pedir, mas não para agradecer”. São Padre Pio de Pietrelcina