Encontrados 351 resultados para: persecución de Saúl

  • Tenía un hijo llamado Saúl, buen mozo. No había entre los israelitas quien le superase; a todos les sacaba la cabeza. (I Samuel 9, 2)

  • Un día a Quis se le extraviaron sus asnas; entonces dijo a su hijo Saúl: "Toma contigo a uno de los mozos y vete a buscar las asnas". (I Samuel 9, 3)

  • Cuando llegaron al país de Suf, Saúl dijo al mozo que le acompañaba: "Demos la vuelta, no sea que mi padre, más que por las asnas, esté intranquilo por nosotros". (I Samuel 9, 5)

  • Saúl respondió al mozo: "Si, vamos allá, ¿qué llevaremos a ese hombre? Ya no hay pan en nuestros sacos y no tenemos nada que ofrecer al hombre de Dios. ¿Qué le daremos?". (I Samuel 9, 7)

  • El mozo dijo a Saúl: "Mira, he encontrado en mi bolso una pequeña moneda de plata; se la daré al hombre de Dios para que nos indique el camino que debemos seguir". (I Samuel 9, 8)

  • Saúl respondió al mozo: "Muy bien dicho; vamos". Y fueron a la ciudad, donde estaba el hombre de Dios. (I Samuel 9, 10)

  • El día antes de que llegara Saúl, el Señor había advertido a Samuel: (I Samuel 9, 15)

  • Cuando Samuel vio a Saúl, el Señor le dijo: "Éste es el hombre de que te hablé; éste es el que regirá a mi pueblo". (I Samuel 9, 17)

  • Saúl se acercó a Samuel en medio de la entrada y le dijo: "Indícanos, por favor, dónde está la casa del vidente". (I Samuel 9, 18)

  • Saúl respondió: "¿No soy yo de Benjamín, la más pequeña de las tribus de Israel, y mi familia no es la más pequeña de todas las de la tribu de Benjamín? ¿Por qué me dices esto?". (I Samuel 9, 21)

  • Samuel llevó consigo a Saúl y a su mozo, los introdujo en la sala y les dio el primer puesto entre los invitados, que eran treinta personas. (I Samuel 9, 22)

  • El cocinero tomó un pernil y el rabo y se lo sirvió a Saúl. Samuel le dijo: "Ahí tienes la porción reservada; come, porque ella fue reservada para este momento cuando convoqué al pueblo". Y aquel día Saúl comió con Samuel. (I Samuel 9, 24)


“O mais belo Credo é o que se pronuncia no escuro, no sacrifício, com esforço”. São Padre Pio de Pietrelcina