Encontrados 386 resultados para: reyes amorreos

  • Entonces el rey de Israel exclamó: "¡Ay! Sin duda que el Señor ha reunido a estos tres reyes para entregarlos en manos de Moab". (II Reyes 3, 10)

  • Eliseo dijo al rey de Israel: "¿Qué tengo que ver yo contigo? Vete a consultar a los profetas de tu padre y a los de tu madre". Pero el rey de Israel repuso: "Es que el Señor nos ha reunido a tres reyes para entregarnos en manos de Moab". (II Reyes 3, 13)

  • Por su parte, todos los moabitas, enterados de que los reyes avanzaban para luchar contra ellos, se concentraron todos, desde la edad de empuñar las armas para arriba, y se situaron en la frontera. (II Reyes 3, 21)

  • y dijeron: "Esto es sangre. Sin duda que los reyes se han acuchillado y se han matado unos a otros. Moabitas, ¡al botín!". (II Reyes 3, 23)

  • El Señor había hecho oír en el campamento de Siria un estrépito de carros de combate y de caballos, estrépito como de un poderoso ejército, y se habían dicho unos a otros: "El rey de Israel ha contratado a los reyes hititas y a los reyes de Egipto para atacarnos". (II Reyes 7, 6)

  • Siguió la conducta de los reyes de Israel y de la casa de Ajab, pues estaba casado con una hija de este. Hizo lo que es malo a los ojos del Señor. (II Reyes 8, 18)

  • El resto de la historia de Jorán y todo lo que hizo está escrito en los anales de los reyes de Judá. (II Reyes 8, 23)

  • Él entró, y después de haber comido y bebido, ordenó: "Id a ver a esa maldita y sepultadla, porque es hija de reyes". (II Reyes 9, 34)

  • Pero ellos, llenos de miedo, dijeron: "Si dos reyes no han podido hacerle frente, ¿cómo lo vamos a hacer nosotros?". (II Reyes 10, 4)

  • El resto de la historia de Jehú, sus proezas y todo lo que hizo está escrito en el libro de los anales de los reyes de Israel. (II Reyes 10, 34)

  • y reunió a los jefes de centuria, a los carios, a los de la escolta real y a todo el pueblo. Llevaron al rey del templo del Señor al palacio real, entrando por la puerta de la escolta regia, y el monarca se sentó sobre el trono de los reyes. (II Reyes 11, 19)

  • Pero Joás, rey de Judá, tomó todas las ofrendas que habían hecho al templo sus antepasados Josafat, Jorán y Ocozías, reyes de Judá, y las que él mismo había hecho, y todo el oro que había en el templo del Señor y en el palacio real, y se lo mandó todo a Jazael, rey de Siria, el cual se retiró de Jerusalén. (II Reyes 12, 19)


“Seja paciente nas aflições que o Senhor lhe manda.” São Padre Pio de Pietrelcina