Encontrados 35 resultados para: sala

  • Cuando Simón y sus hijos se pusieron alegres, se levantó con sus hombres, tomaron las armas, volvieron a la sala del festín y mataron a Simón, a sus hijos y a algunos de sus servidores. (I Macabeos 16, 16)

  • Así era llevado, incapaz de valerse por sí mismo, aquel que poco antes había entrado arrogante en la sala del tesoro con gran séquito y numerosa escolta, reconociendo todos claramente el poder de Dios. (II Macabeos 3, 28)

  • y los llevé al templo del Señor, a la sala de Benhanán, hombre de Dios, la que está junto a la sala de los dignatarios, encima de la de Maasías, hijo de Salún, guardián de la puerta. (Jeremías 35, 4)

  • Entonces Baruc leyó en el libro las palabras de Jeremías. Era en el templo del Señor, en la sala de Gamarías, hijo del secretario Safán, en el vestíbulo superior, a la entrada de la puerta nueva del templo del Señor. Todo el pueblo podía oír. (Jeremías 36, 10)

  • bajó al palacio real, a la sala del secretario, donde estaban reunidos en sesión todos los dignatarios: Elisamá, el secretario; Delayas, hijo de Semayas; Elnatán, hijo de Acbor; Gamarías, hijo de Safán; Sedecías, hijo de Ananías, y todos los demás dignatarios. (Jeremías 36, 12)

  • Después entraron donde el rey en el atrio del palacio, dejaron el libro en depósito en la sala del secretario Elisamá y refirieron al rey todo lo sucedido. (Jeremías 36, 20)

  • Entonces el rey mandó a Yehudí a buscar el libro. Éste lo tomó de la sala del secretario Elisamá y se lo leyó en alta voz al rey y a todos los dignatarios reunidos en torno al monarca. (Jeremías 36, 21)

  • Cada sala medía una vara de largo y otra de ancho; la pilastra entre sala y sala era de dos metros y medio, y el umbral del pórtico por el lado de su vestíbulo hasta el interior medía una vara. (Ezequiel 40, 7)

  • Delante de cada sala había un parapeto de medio metro por un lado y por el otro, y cada una de las celdas tenía tres metros por ambos lados. (Ezequiel 40, 12)

  • Midió a continuación el pórtico desde el fondo de una sala al de la otra. La anchura era de doce metros y medio entre cada abertura. (Ezequiel 40, 13)

  • Había también una sala, cuya entrada se hallaba en el vestíbulo de los pórticos; allí se lavaban los holocaustos. (Ezequiel 40, 38)

  • Y me dijo: "La sala que da al sur es para los sacerdotes encargados del servicio del templo; (Ezequiel 40, 45)


“Se você fala das próprias virtudes para se exibir ou para vã ostentação perde todo o mérito.” São Padre Pio de Pietrelcina