Encontrados 935 resultados para: seguir a Jesús

  • Hazme sentir tu amor por la mañana, pues confío en ti; enséñame el camino que tengo que seguir, pues me dirijo a ti; (Salmos 143, 8)

  • y algunos del pueblo fueron a ver al rey, quien les autorizó a seguir las costumbres paganas. (I Macabeos 1, 13)

  • Les dieron cartas de recomendación para las autoridades de cada país, para que les permitieran seguir en paz hasta el país de Judá. (I Macabeos 12, 4)

  • Después de haber reflexionado, quiero seguir hablando, pues estoy lleno, como la luna llena. (Eclesiástico 39, 12)

  • Así también Jesús, hijo de Josedec, los cuales en sus días reedificaron la casa y levantaron un santuario consagrado al Señor, destinado a una gloria eterna. (Eclesiástico 49, 12)

  • Doctrina sabia y ciencia consignó en este libro Jesús, hijo de Sirá Eleazar, de Jerusalén, que derramó como lluvia la sabiduría de su corazón. (Eclesiástico 50, 27)

  • ¿Quién ha entregado a Jacob al saqueo, y a Israel a los depredadores? ¿No ha sido el Señor, contra quien pecamos, cuyos caminos no quisimos seguir, ni escuchamos su ley? (Isaías 42, 24)

  • Esto dice el Señor, tu redentor, el Santo de Israel: Yo soy el Señor, tu Dios, el que te enseña lo que te da éxito y te indica el camino que debes seguir. (Isaías 48, 17)

  • Se sacrifica un toro, se mata a un hombre, se inmola una oveja, se estrangula un perro; se ofrece sangre de cerdo, se quema incienso adorando a un ídolo. Como ellos gustan de seguir sus caminos y su alma se complace en sus horrores, (Isaías 66, 3)

  • Yo los he aventado con el bieldo por las ciudades del país; he privado de hijos a mi pueblo, lo he aniquilado, porque no desiste de seguir sus caminos. (Jeremías 15, 7)

  • Y que el Señor, tu Dios, nos indique el camino que hemos de seguir y lo que debemos hacer". (Jeremías 42, 3)

  • Jacob de José, el esposo de María, de la cual nació Jesús, que es el mesías. (Mateo 1, 16)


“Onde não há obediência, não há virtude. Onde não há virtude, não há bem, não há amor; e onde não há amor, não há Deus; e sem Deus não se chega ao Paraíso. Tudo isso é como uma escada: se faltar um degrau, caímos”. São Padre Pio de Pietrelcina