Carta a los Hebreos, 2
11. de este modo el que comunicaba la santidad se identificaría con aquellos a los que sanctificaba. Por eso él no se avergüenza de llamarnos hermanos, cuando dice:
11. de este modo el que comunicaba la santidad se identificaría con aquellos a los que sanctificaba. Por eso él no se avergüenza de llamarnos hermanos, cuando dice:
“Para mim, Deus está sempre fixo na minha mente e estampado no meu coração.” São Padre Pio de Pietrelcina