Evangelio según San Marcos, 8
25. Jesús le puso nuevamente las manos en los ojos, y el hombre se encontró con buena vista; se recuperó plenamente, y podía ver todo con claridad.
25. Jesús le puso nuevamente las manos en los ojos, y el hombre se encontró con buena vista; se recuperó plenamente, y podía ver todo con claridad.
“Temos muita facilidade para pedir, mas não para agradecer”. São Padre Pio de Pietrelcina