Proverbios, 5
3. Las lisonjas de la mujer infiel son dulces como la miel, sus palabras son más pegajosas que el aceite.
3. Las lisonjas de la mujer infiel son dulces como la miel, sus palabras son más pegajosas que el aceite.
“Quando a videira se separa da estaca que a sustenta, cai, e ao ficar na terra apodrece com todos os cachos que possui. Alerta, portanto, o demônio não dorme!” São Padre Pio de Pietrelcina