Sabiduría, 17
4. Los escondrijos donde se refugiaron no los pusieron al abrigo del miedo: ruidos espantosos resonaban a su derredor, y se les aparecían espectros lívidos, de rasgos lúgubres.
4. Los escondrijos donde se refugiaron no los pusieron al abrigo del miedo: ruidos espantosos resonaban a su derredor, y se les aparecían espectros lívidos, de rasgos lúgubres.
“Deus quer que as suas misérias sejam o trono da Sua misericórdia.” São Padre Pio de Pietrelcina