Gefunden 171 Ergebnisse für: ídolos

  • Entonces, ¿se puede comer carne sacrificada a los ídolos? Sabemos que un ídolo no es nada en realidad y que no hay más Dios que el Unico. (1º Carta a los Corintios 8, 4)

  • No se hagan servidores de ídolos, al igual que algunos de ellos, como dice la Escritura: El pueblo se sentó a comer y a beber y se levantaron para divertirse. (1º Carta a los Corintios 10, 7)

  • Por lo tanto, hermanos muy queridos, huyan del culto a los ídolos. (1º Carta a los Corintios 10, 14)

  • Pero si alguien les dice: «Esa es carne sacrificada a los ídolos», no coman. Piensen en el que les advirtió y respeten su conciencia. (1º Carta a los Corintios 10, 28)

  • Cuando aún eran paganos, perdían el control de sí mismos al ser llevados a sus ídolos sin voz ni vida. (1º Carta a los Corintios 12, 2)

  • ¿Qué tiene que ver el Templo de Dios con los ídolos? Nosotros somos el Templo del Dios vivo. Dios lo dijo: Habitaré y viviré en medio de ellos; yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo. (2º Carta a los Corintios 6, 16)

  • culto de los ídolos y magia; odios, ira y violencias; celos, furores, ambiciones, divisiones, sectarismo (Carta a los Gálatas 5, 20)

  • Por tanto, hagan morir en ustedes lo que es «terrenal», es decir, libertinaje, impureza, pasión desordenada, malos deseos y el amor al dinero, que es una manera de servir a los ídolos. (Carta a los Colosenses 3, 5)

  • Todos hablan del éxito que tuvimos entre ustedes y de cómo se pasaron de los ídolos a Dios. Pues empezaron a servir al Dios vivo y verdadero, (1º Carta a los Tesalonicenses 1, 9)

  • Ya es bastante el tiempo que dimos a todo lo que buscan los paganos: excesos, pasiones, borracheras, orgías y culto de los ídolos. (1º Carta de Pedro 4, 3)

  • Hijitos, guárdense de los ídolos. (1º Carta de Juan 5, 21)

  • Pero tengo alguna cosa contra ti: toleras a los que tienen la doctrina de Balaán, el que enseñó a Balac a hacer tropezar a los israelitas con la prostitución y las carnes sacrificadas a los ídolos. (Apocalipsis 2, 14)


“Vive-se de fé, não de sonhos.” São Padre Pio de Pietrelcina