Gefunden 50 Ergebnisse für: Pastor

  • Después dio a luz a Abel, el hermano de Caïn. Abel fue pastor de ovejas, mientras que Caín labraba la tierra. (Génesis 4, 2)

  • Luego bendijo a José diciendo: «Que el Dios ante el cual caminaron mis padres Abraham e Isaac, el Dios que ha sido mi pastor desde el día en que nací hasta hoy, (Génesis 48, 5)

  • pero su arco se ha mantenido firme y sus brazos no han aflojado, por la mano del Fuerte de Jacob, por el Pastor y la Roca de Israel, (Génesis 49, 24)

  • para que salga y entre al frente de ellos. El los hará salir y entrar, y con esto el pueblo de Yavé no se parecerá a un rebaño sin pastor.» (Números 27, 17)

  • Se levantó David de madrugada, dejó su rebaño encargado a un pastor y, tomando las cosas, se fue como le había mandado su padre. Y llegó al campamento justo cuando el ejército salía para ponerse en posición de ataque lanzando el grito de guerra. (1 Samuel 17, 20)

  • Tomó, en cambio, su bastón, escogió en el río cinco piedras lisas y las colocó en su bolsa de pastor. Luego avanzó hacia el filisteo con la honda en la mano. (1 Samuel 17, 40)

  • Entonces Miqueas dijo: «He visto a todo Israel disperso por las montañas, como rebaño sin pastor. Dice Yavé: Esa gente ya no tiene amo. Que cada uno vuelva a su casa en paz.» (1 Reyes 22, 17)

  • Entonces Miqueas dijo: «He visto todo Israel disperso por los montes como ovejas sin pastor; Yavé ha dicho: Estos ya no tienen quien los guíe; que vuelvan en paz cada cual a su casa.» (2 Crónicas 18, 16)

  • Te guiaré por toda Judea hasta llegar al corazón de Jerusalén. Tú los llevarás como ovejas sin pastor, y ni siquiera un perro ladrará contra ti. Todo esto me ha sido revelado para que te lo comunique.» (Judit 11, 19)

  • El Señor es mi pastor: nada me falta; (Salmos 23, 1)

  • Fue su pastor con un corazón perfecto y con mano prudente los condujo. (Salmos 78, 72)

  • Escucha, pastor de Israel, que guías a José como un rebaño, tú que te sientas en los querubines (Salmos 80, 2)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.” São Padre Pio de Pietrelcina