Gefunden 234 Ergebnisse für: Profeta

  • El profeta volvió donde el rey de Israel para decirle: «Ten ánimo, reflexiona y prepárate, porque el año que viene, el rey de Aram volverá a atacarte.» (1 Reyes 20, 22)

  • El hermano profeta fue a buscar a otro, al que dijo: «Hiéreme.» El hombre le dio un golpe y lo dejó herido. (1 Reyes 20, 37)

  • Entonces el profeta se fue y, disfrazándose la cara con un pañuelo, se puso a esperar al rey en el camino. (1 Reyes 20, 38)

  • Entonces Josafat le preguntó: «¿No hay aquí algún profeta de Yavé para que consultemos a Yavé por su medio?» Uno de los servidores del rey de Israel dijo: «Está aquí Eliseo, hijo de Safat, el que echaba el agua en manos de Elías.» (2 Reyes 3, 11)

  • Ella dijo a su patrona: «Ojalá mi señor se presentara al profeta que hay en Samaria, pues él le sanaría la lepra.» (2 Reyes 5, 3)

  • Le dijo el rey de Aram: «Anda donde el profeta y además mandaré una carta al rey de Israel.» Naamán, pues, se fue tomando diez barras de oro, seis mil monedas de plata y diez vestiduras. (2 Reyes 5, 5)

  • El hombre de Dios, Eliseo, supo que el rey de Israel había rasgado sus vestidos, y le mandó a decir: «¿Por qué has rasgado tus vestidos? Que el hombre venga a mí, y sabrá que hay un profeta en Israel.» (2 Reyes 5, 8)

  • Sus servidores se acercaron a él cuando se iba, y le dijeron: «Padre, si el profeta te hubiera mandado hacer una cosa difícil, ¿no la habrías hecho? Y ¡qué fácil es bañarte, como el profeta te ha ordenado!» (2 Reyes 5, 13)

  • Uno de los oficiales dijo: «No, rey mi señor, nadie de nosotros te ha traicionado, sino que Eliseo, el profeta que hay en Israel, revela a su rey hasta las palabras que tú has dicho en tu dormitorio.» (2 Reyes 6, 12)

  • El profeta Eliseo llamó a uno de los hermanos profetas y le dijo: «Arréglate para ir a la ciudad de Ramot, en Galaad, y lleva contigo este frasco de aceite. (2 Reyes 9, 1)

  • El restableció las fronteras de Israel desde la entrada de Jamat, hasta el mar Muerto, según la palabra que Yavé, Dios de Israel, había dicho por boca de su siervo el profeta Jonás, hijo de Amitai, que era de Gatjefer. (2 Reyes 14, 25)

  • En seguida mandó a Elyaquim, a Sobna y a los ancianos de los sacerdotes, todos vestidos con sacos, a donde Isaías, el profeta, hijo de Amós. (2 Reyes 19, 2)


“O Anjo de Deus não nos abandona jamais.” São Padre Pio de Pietrelcina