Gefunden 473 Ergebnisse für: jacob y la bendición

  • Yo se lo digo: vendrán muchos del oriente y del occidente para sentarse a la mesa con Abrahán, Isaac y Jacob en el Reino de los Cielos, (Evangelio según San Mateo 8, 11)

  • Si esta familia la merece, recibirá vuestra paz; y si no la merece, la bendición volverá a ustedes. (Evangelio según San Mateo 10, 13)

  • Y mandó a la gente que se sentara en el pasto. Tomó los cinco panes y los dos pescados, levantó los ojos al cielo, pronunció la bendición, partió los panes y los entregó a los discípulos. Y los discípulos los daban a la gente. (Evangelio según San Mateo 14, 19)

  • Yo soy el Dios de Abrahán, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob? Él no es un Dios de muertos, sino de vivos.» (Evangelio según San Mateo 22, 32)

  • Mientras comían, Jesús tomó pan, pronunció la bendición, lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: «Tomen y coman; esto es mi cuerpo.» (Evangelio según San Mateo 26, 26)

  • Tomó Jesús los cinco panes y los dos pescados, levantó los ojos al cielo, pronunció la bendición, partió los panes y los iba dando a los discípulos para que se los sirvieran a la gente. Asimismo repartió los dos pescados entre todos. (Evangelio según San Marcos 6, 41)

  • Tenían también algunos pescaditos. Jesús pronunció la bendición y mandó que también los repartieran. (Evangelio según San Marcos 8, 7)

  • Y en cuanto a saber si los muertos resucitan, ¿no han leído en el libro de Moisés, en el capítulo de la zarza, cómo Dios le dijo: Yo soy el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob? (Evangelio según San Marcos 12, 26)

  • Durante la comida Jesús tomó pan, y después de pronunciar la bendición, lo partió y se lo dio diciendo: «Tomen; esto es mi cuerpo.» (Evangelio según San Marcos 14, 22)

  • gobernará por siempre al pueblo de Jacob y su reinado no terminará jamás.» (Evangelio según San Lucas 1, 33)

  • hijo de Jacob, hijo de Isaac, hijo de Abraham, hijo de Tara, hijo de Najor, (Evangelio según San Lucas 3, 34)

  • Jesús entonces tomó los cinco panes y los dos pescados, levantó los ojos al cielo, pronunció la bendición, los partió y se los entregó a sus discípulos para que los distribuyeran a la gente. (Evangelio según San Lucas 9, 16)


“Você deve ter sempre prudência e amor. A prudência tem olhos; o amor tem pernas. O amor, como tem pernas, gostaria de correr a Deus. Mas seu impulso de deslanchar na direção dEle é cego e, algumas vezes, pode tropeçar se não for guiado pela prudência, que tem olhos.” São Padre Pio de Pietrelcina