Gefunden 579 Ergebnisse für: muerte de los primogénitos

  • Si un hombre tiene relaciones con una esclava ya entregada a otro, sin que haya sido rescatada ni liberada, serán castigados los dos, pero no con pena de muerte, pues ella no era mujer libre. (Levítico 19, 20)

  • Cualquiera que maldiga a su padre o a su madre morirá. El que maldice a su padre o a su madre, quiere su propia muerte. (Levítico 20, 9)

  • El hombre que se acueste con la mujer de su padre ha descubierto la desnudez de su padre; los dos morirán, y serán respnsables de su propia muerte. (Levítico 20, 11)

  • Si un hombre se acuesta con su nuera, los dos morirán: han cometido una infamia y son responsables de su propia muerte. (Levítico 20, 12)

  • Si un hombre se acuesta con un varón, como se acuesta con una mujer, ambos han cometido una infamia; los dos morirán y serán responsables de su muerte. (Levítico 20, 13)

  • Y si una mujer la tiene con un animal, los dos morirán también. Son responsables de su propia muerte. (Levítico 20, 16)

  • el que blasfeme el nombre de Yavé será castigado de muerte: toda la comunidad lo apedreará. Sea israelita o extranjero, si blasfema el nombre de Yavé, morirá. (Levítico 24, 16)

  • El que hiera de muerte a cualquier persona morirá. (Levítico 24, 17)

  • El que hiera de muerte a un animal pagará con otro; vida por vida. (Levítico 24, 18)

  • Nadie podrá consagrar los primogénitos de su ganado, porque éstos ya pertenecen a Yavé. Sean de ganado mayor o menor, pertenecen a Yavé. (Levítico 27, 26)

  • Cuando la Morada haya de trasladarse, los levitas la desarmarán;cuando tenga que pararse, ellos la montarán. Cualquier extraño que se acerque, será castigado de muerte. (Números 1, 51)

  • «He elegido a los levitas de entre los demás hijos de Israel, en lugar de todos los primogénitos de Israel, de los que abren el seno materno: los Levitas serán, pues, para mí. (Números 3, 12)


“O sábio elogia a mulher forte dizendo: os seu dedos manejaram o fuso. A roca é o alvo dos seus desejos. Fie, portanto, cada dia um pouco. Puxe fio a fio até a execução e, infalivelmente, você chegará ao fim. Mas não tenha pressa, pois senão você poderá misturar o fio com os nós e embaraçar tudo.” São Padre Pio de Pietrelcina