Gefunden 83 Ergebnisse für: segunda venida

  • Llamó a Joab para enviarlo al rey, pero Joab no quiso ir. Lo llamó por segunda vez, pero tampoco quiso ir. (2 Samuel 14, 29)

  • se le apareció Yavé por segunda vez, como se le había aparecido en Gabaón. (1 Reyes 9, 2)

  • Pero por segunda vez el ángel de Yavé lo despertó diciendo: «Levántate y come; si no, el camino será demasiado largo para ti.» (1 Reyes 19, 7)

  • Por segunda vez mandaron un mensajero que, al llegar donde ellos, les dijo: «El rey quiere saber si hay alguna novedad.» Y Jehú respondió nuevamente: «No te preocupes por la novedad. Pasa tras de mí y sígueme.» (2 Reyes 9, 19)

  • Pero él les mandó una segunda carta, que decía: «Si son de mi partido y de los que me obedecen, tomen las cabezas de los hijos del rey, su señor, y vengan mañana a conversar conmigo a estas horas en Jezrael.» Los hijos del rey eran setenta y se criaban en las casas de las familias más importantes de la ciudad. (2 Reyes 10, 6)

  • Se alegró Ezequías por su venida y enseñó a los enviados su cámara del tesoro, la plata, el oro, los aromas, el aceite oloroso, sus armas y todo cuanto había en el tesoro. No hubo cosa en su palacio, ni de todo lo que poseía, que Ezequías no mostrara. (2 Reyes 20, 13)

  • Tocó la primera suerte a Yoyarib; la segunda a Jedaías; (1 Crónicas 24, 7)

  • La primera suerte recayó para Asaf sobre José; él y sus hijos y hermanos, doce. La segunda sobre Guedalías con sus hermanos e hijos, doce. (1 Crónicas 25, 9)

  • La vigésimo segunda, sobre Guidaltí, sus hijos y hermanos, doce. (1 Crónicas 25, 28)

  • Entonces Salomón celebró la fiesta durante siete días y con él todo Israel. Era una asamblea inmensa venida desde la Entrada de Jamat hasta el Torrente de Egipto. (2 Crónicas 7, 8)

  • Después se acercó a Sara y la bendijo así: «¡Bien venida, hija! Bendito sea Dios que te trajo hasta nosotros, y benditos tus padres.» (Tobías 11, 17)

  • En cuanto a ti, Ajior, mercenario de Ammón, que pronunciaste estas palabras para tu desgracia, desde ahora no verás mi rostro hasta el día en que me vengue de esta raza venida de Egipto. (Judit 6, 5)


“Nas tribulações é necessário ter fé em Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina