Gefunden 244 Ergebnisse für: Faraón

  • (pues Faraón rey de Egypto había subido y se había apoderado de Guézer, la incendió y mató a los cananeos que habitaban en la ciudad, y se la dio en dote a su hija, la mujer de Salomón, (I Reyes 9, 16)

  • Cuando la hija de Faraón subió de la ciudad de David a la casa que había hecho para ella, entonces edificó el Milló. (I Reyes 9, 24)

  • El rey Salomón amó a muchas mujeres extranjeras, además de la hija de Faraón, moabitas, ammonitas, edomitas, sidonias, hititas, (I Reyes 11, 1)

  • Habían partido de Madián y llegaron a Farán, tomaron consigo hombres de Farán y llegaron a Egipto, donde Faraón, rey de Egipto, que le dio casa, le prometió sustento y le dio tierras. (I Reyes 11, 18)

  • Hadad encontró mucho favor a los ojos de Faraón, que le dio por mujer a la hermana de su mujer, la hermana de la Gran Dama Tajfenés. (I Reyes 11, 19)

  • La hermana de Tajfenés le dio a luz a su hijo Guenubat, que Tajfenés crió en la casa de Faraón, y Guenubat vivió en la casa de Faraón con los hijos de Faraón. (I Reyes 11, 20)

  • Oyó Hadad en Egipto que David se había acostado con sus padres y que había muerto Joab, jefe del ejército, y dijo Hadad a Faraón: «Déjame partir para ir a mi tierra.» (I Reyes 11, 21)

  • Faraón le dijo: «¿Qué te falta a mi lado para que trates de ir a tu tierra?» El respondió: «Nada, pero déjame partir.» (I Reyes 11, 22)

  • Esto sucedió porque los israelitas habían pecado contra Yahveh su Dios, que los había hecho subir de la tierra de Egipto, de bajo la mano de Faraón, rey de Egipto, y habían reverenciado a otros dioses, (II Reyes 17, 7)

  • Mira: te has confiado al apoyo de esa caña rota, de Egipto, que penetra y traspasa la mano del que se apoya sobre ella. Pues así es Faraón, rey de Egipto, para todos los que confían en él. (II Reyes 18, 21)

  • En sus días subió el Faraón Nekó, rey de Egipto, hacia el rey de Asiria, junto al río Eufrates. Fue el rey Josías a su encuentro, pero Nekó le mató en Meguiddó en cuanto le vio. (II Reyes 23, 29)

  • El Faraón Nekó lo encadenó en Riblá, en el país de Jamat, para que no reinara más en Jerusalén y puso un impuesto al país de cien talentos de plata y diez talentos de oro. (II Reyes 23, 33)


“Quanto mais se caminha na vida espiritual, mais se sente a paz que se apossa de nós.” São Padre Pio de Pietrelcina