Gefunden 19 Ergebnisse für: Nabal

  • El hombre se llamaba Nabal y su mujer se llamaba Abigaíl; ella era muy prudente y hermosa, pero el hombre era duro y de mala conducta. Era calebita. (I Samuel 25, 3)

  • Supo David en el desierto que Nabal estaba esquilando su rebaño (I Samuel 25, 4)

  • y mandó diez muchachos diciéndoles: «Subid a Carmelo y llegad donde Nabal y le saludáis en mi nombre, (I Samuel 25, 5)

  • Llegaron los muchachos de David, dijeron a Nabal todas estas palabras en nombre de David y se quedaron esperando. (I Samuel 25, 9)

  • Pero Nabal respondió a los servidores de David: «¿Quién es David y quién es el hijo de Jesé? Abundan hoy en día los siervos que andan huídos de sus señores. (I Samuel 25, 10)

  • Uno de los servidores avisó a Abigaíl, mujer de Nabal, diciendo: «Mira que David ha enviado mensajeros desde el desierto para saludar a nuestro amo, y se ha lanzado contra ellos. (I Samuel 25, 14)

  • diciendo a sus servidores: «Pasad delante de mí, que yo os sigo.» Pero nada dijo a su marido Nabal. (I Samuel 25, 19)

  • Esto haga Dios a David y esto otro añada si para el alba dejo con vida ni un solo varón de los de Nabal.» (I Samuel 25, 22)

  • No haga caso mi señor de este necio de Nabal; porque le va bien el nombre: necio se llama y la necedad está con él; yo, tu sierva, no vi a los siervos que mi señor había enviado. (I Samuel 25, 25)

  • Ahora, mi señor, por Yahveh y por tu vida, por Yahveh que te ha impedido derramar sangre y tomarte la justicia por tu propia mano, que sean como Nabal tus enemigos y los que buscan la ruina de mi señor. (I Samuel 25, 26)

  • Pero con todo, vive Yahveh, Dios de Israel, que me ha impedido hacerte mal, que de no haberte apresurado a venir a mi encuentro, no le hubiera quedado a Nabal, al romper el alba, ni un solo varón.» (I Samuel 25, 34)

  • Cuando Abigaíl llegó donde Nabal, estaba celebrando en su casa un banquete regio; estaba alegre su corazón y completamente borracho. No le dijo una palabra, ni grande ni pequeña, hasta el lucir del día. (I Samuel 25, 36)


“Na igreja se fala somente com Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina