Gefunden 210 Ergebnisse für: familia real
iba diciendo el rey: «¿No es ésta la gran Babilonia que yo he edificado como mi residencia real, con el poder de mi fuerza y para la gloria de mi majestad?» (Daniel 4, 27)
De pronto aparecieron los dedos de una mano humana que se pusieron a escribir, detrás del candelabro, en la cal de la pared del palacio real, y el rey vio la palma de la mano que escribía. (Daniel 5, 5)
Pero habiéndose engreído su corazón y obstinado su espíritu hasta la arrogancia, fue depuesto de su trono real, y se le quitó su gloria. (Daniel 5, 20)
Todos los ministros del reino, prefectos, sátrapas, consejeros y gobernadores, aconsejan unánimemente que se promulgue un edicto real para poner en vigor la prohibición siguiente: Todo aquel que en el término de treinta días dirija una oración a quienquiera que sea, dios u hombre, fuera de ti, oh rey, será arrojado al foso de los leones. (Daniel 6, 8)
Entonces se presentaron al rey y le dijeron acerca de la prohibición real: «¿No has firmado tú una prohibición según la cual todo el que dirigiera, en el término de treinta días, una oración a quienquiera que fuese, dios u hombre, fuera de ti, oh rey, sería arrojado al foso de los leones?» Respondió el rey: «La cosa está decidida, según la ley de los medos y los persas, que es irrevocable.» (Daniel 6, 13)
En su lugar surgiró otro, que enviará un exactor contra el esplendor real: en pocos días será destruido, mas no en público ni en guerra. (Daniel 11, 20)
Daniel mandó a sus criados que trajeran ceniza y la esparcieran por todo el suelo del templo, sin más testigo que el rey. Luego salieron, cerraron la puerta, la sellaron con el anillo real, y se fueron. (Daniel 14, 14)
Escuchad esto, sacerdotes, estad atentos, casa de Israel, casa real, prestad oído, porque el juicio es cosa vuestra; pero vosotros habéis sido un lazo en Mispá, y una red tendida en el Tabor. (Oseas 5, 1)
Escuchad esta palabra que dice Yahveh contra vosotros, hijos de Israel, contra toda la familia que yo hice subir del país de Egipto: (Amós 3, 1)
Y se lamentará el país, cada familia aparte: la familia de la casa de David aparte y sus mujeres aparte; la familia de la casa de Natán aparte y sus mujeres aparte; (Zacarías 12, 12)
la familia de la casa de Leví aparte; y sus mujeres aparte; la familia de la casa de Semeí aparte y sus mujeres aparte; (Zacarías 12, 13)
todas las demás familias, cada familia aparte y sus mujeres aparte. (Zacarías 12, 14)