Gefunden 254 Ergebnisse für: tribu de isacar

  • era hijo de una viuda de la tribu de Neftalí; su padre era de Tiro; trabajaba en bronce y estaba lleno de ciencia, pericia y experiencia para realizar todo trabajo en bronce; fue donde el rey Salomón y ejecutó todos sus trabajos. (I Reyes 7, 14)

  • Tampoco arrancaré todo el reino; daré una tribu a tu hijo, en atención a David, mi siervo, y a causa de Jerusalén que he elegido.» (I Reyes 11, 13)

  • Le quedará la otra tribu en atención a mi siervo David y a Jerusalén, la ciudad que me elegí entre todas las tribus de Israel; (I Reyes 11, 32)

  • daré a su hijo una tribu para que quede siempre a David mi siervo una lámpara en mi presencia, delante de mí en Jerusalén, la ciudad que me elegí para poner allí mi Nombre. (I Reyes 11, 36)

  • Cuando todo Israel supo que Jeroboam había vuelto, enviaron a llamarle a la asamblea y le hicieron rey sobre todo Israel; no hubo quien siguiera a la casa de David, aparte sólo la tribu de Judá. (I Reyes 12, 20)

  • En llegando a Jerusalén reunió Roboam a toda la casa de Judá y a la tribu de Benjamín, 180.000 hombres guerreros escogidos, para combatir contra la casa de Israel y devolver el reino a Roboam, hijo de Salomón. (I Reyes 12, 21)

  • Basá, hijo de Ajías, de la casa de Isacar, conspiró contra él y le mató en Guibbetón de los filisteos, cuando Nadab y todo Israel estaban asediando a Guibbetón. (I Reyes 15, 27)

  • Yahveh se airó en gran manera contra Israel y los apartó de su rostro, quedando solamente la tribu de Judá. (II Reyes 17, 18)

  • Estos son los hijos de Israel: Rubén, Simeón, Leví y Judá, Isacar y Zabulón, (I Crónicas 2, 1)

  • Los hijos de Rubén, los de Gad y la media tribu de Manasés eran hombres valientes, llevaban escudo y espada, manejaban el arco y eran diestros en la guerra. Salían a campaña en número de 44.760. (I Crónicas 5, 18)

  • Los hijos de la media tribu de Manasés habitaron en el país desde Basán hasta Báal Hermón, Senir y la montaña de Hermón. Eran muy numerosos. (I Crónicas 5, 23)

  • Por lo cual el Dios de Israel suscitó el espíritu de Pil, rey de Asiria, que deportó a los rubenitas, los gaditas y la media tribu de Manasés, y los llevó a Jalaj, Jabor, Jará y el río Gozán, hasta el día de hoy. (I Crónicas 5, 26)


“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina