Gefunden 51 Ergebnisse für: Cedro
Jirán, rey de Tiro, había suministrado a Salomón maderas de cedro y de ciprés y oro, y Salomón entregó a Jirán veinte ciudades en la región de Galilea. (I Reyes 9, 11)
Joás, rey de Israel, mandó a decir a Amasías, rey de Judá: "El cardo del Líbano mandó a decir al cedro del Líbano: Da tu hija por esposa a mi hijo. Pero pasaron las fieras del Líbano y pisotearon el cardo. (II Reyes 14, 9)
Jirán, rey de Tiro, envió mensajeros a David con madera de cedro, albañiles y carpinteros para que le construyeran un palacio. (I Crónicas 14, 1)
Cuando David se estableció en su palacio, dijo al profeta Natán: "Yo estoy viviendo en una casa de cedro, mientras que el arca de la alianza del Señor está bajo una tienda". (I Crónicas 17, 1)
Durante todo el tiempo que anduve errante con los israelitas, jamás dije a ninguno de los jueces de Israel, a los que puse para que gobernaran a mi pueblo, que me construyera una casa de cedro. (I Crónicas 17, 6)
y maderas de cedro sin tasa, pues sidonios y tirios habían traído a David troncos de cedro en abundancia. (I Crónicas 22, 4)
Luego mandó decir a Jirán, rey de Tiro: "Haz conmigo lo que hiciste con David, mi padre, enviándole madera de cedro para construir la casa de su residencia. (II Crónicas 2, 2)
Mándame también madera de cedro, ciprés y sándalo del Líbano, pues conozco bien la habilidad de tus súbditos en derribar los árboles del Líbano. Mis súbditos trabajarán con los tuyos. (II Crónicas 2, 7)
Joás, rey de Israel, mandó a decir a Amasías, rey de Judá: "El cardo del Líbano manda a decir al cedro del Líbano: Da tu hija por esposa a mi hijo; pero pasaron las fieras del Líbano y pisotearon el cardo. (II Crónicas 25, 18)
Dieron dinero a los canteros y a los carpinteros; mandaron víveres, bebidas y aceite a los sidonios y a los tirios para que enviasen por mar madera de cedro desde el Líbano a Jafa, conforme a la autorización que les había dado Ciro, rey de Persia. (Esdras 3, 7)
Yergue su cola como un cedro, los tendones de sus muslos están bien entrelazados. (Job 40, 17)
He visto al malvado, lleno de soberbia, elevarse como un cedro frondoso; (Salmos 37, 35)