Gefunden 28 Ergebnisse für: Hitita

  • Y añadió: "En esto conoceréis que en medio de vosotros está un Dios viviente que echará delante de vosotros al cananeo, al hitita, al heveo, al fereceo, al guirgaseo, al amorreo y al jebuseo: (Josué 3, 10)

  • al cananeo de oriente y occidente; al amorreo, al heveo, al fereceo y al jebuseo, en la montaña; al hitita, a los pies del Hermón, en el territorio de Mispá. (Josué 11, 3)

  • David dijo a Ajimélec, el hitita, y a Abisay, hijo de Sarvia: "¿Quién quiere venir conmigo al campamento de Saúl?". Abisay respondió: "Yo iré contigo". (I Samuel 26, 6)

  • David hizo que averiguasen quién era aquella mujer, y le dijeron: "Es Betsabé, hija de Elián, mujer de Urías, el hitita". (II Samuel 11, 3)

  • Entonces David envió este mensaje a Joab: "Envíame a Urías, el hitita". Y Joab envió a Urías a David. (II Samuel 11, 6)

  • Los hombres de la ciudad hicieron una salida para atacar a Joab; cayeron muchos del ejército y de los servidores de David y murió también Urías, el hitita. (II Samuel 11, 17)

  • ¿Quién mató a Abimélec, hijo de Yerubaal? ¿No fue una mujer, que tiró sobre él desde lo alto de los muros una rueda de molino, y murió en Tebes? ¿Por qué os habéis acercado tanto a las murallas?, tú le dirás: También murió tu siervo Urías, el hitita". (II Samuel 11, 21)

  • pero los arqueros tiraron sobre tus siervos desde lo alto de los muros y murieron muchos siervos del rey, y tu siervo Urías, el hitita, murió también". (II Samuel 11, 24)

  • Entonces, ¿por qué has despreciado al Señor haciendo lo que le desagrada? Mataste con la espada a Urías, el hitita, y tomaste por esposa a su mujer. Tú lo mataste con la espada de los amonitas. (II Samuel 12, 9)

  • Por eso, no se apartará nunca de tu casa la espada, por haberme despreciado y haber tomado por esposa a la mujer de Urías, el hitita. (II Samuel 12, 10)

  • Urías, hitita. En total, treinta y siete. (II Samuel 23, 39)

  • pues David había hecho lo que es recto a los ojos del Señor y no se había apartado durante toda su vida en nada de todo lo que el Señor le había mandado, excepto el caso de Urías, el hitita. (I Reyes 15, 5)


O sábio elogia a mulher forte dizendo: os seu dedos manejaram o fuso. A roca é o alvo dos seus desejos. Fie, portanto, cada dia um pouco. Puxe fio a fio até a execução e, infalivelmente, você chegará ao fim. Mas não tenha pressa, pois senão você poderá misturar o fio com os nós e embaraçar tudo.” São Padre Pio de Pietrelcina