Gefunden 70 Ergebnisse für: Iglesia

  • Ellos, enviados por la Iglesia, atravesaron Fenicia y Samaría, narrando la conversión de los paganos y causando un gran gozo a todos los hermanos. (Hechos 15, 3)

  • Al llegar a Jerusalén, fueron acogidos por la Iglesia, los apóstoles y los presbíteros, y entonces contaron todo lo que Dios había hecho con ellos. (Hechos 15, 4)

  • Entonces los apóstoles y los presbíteros, con toda la Iglesia, decidieron elegir a algunos de entre ellos y enviarlos a Antioquía con Pablo y Bernabé. Eligieron a Judas Barsabás y a Silas, hombres eminentes entre los hermanos. (Hechos 15, 22)

  • Zarpó de Éfeso, desembarcó en Cesarea, fue a saludar a la Iglesia y bajó a Antioquía. (Hechos 18, 22)

  • Desde Mileto mandó a Éfeso a llamar a los presbíteros de la Iglesia. (Hechos 20, 17)

  • Cuidad de vosotros y de todo el rebaño del que el Espíritu Santo os ha constituido como guardianes para apacentar la Iglesia de Dios, que ha adquirido con su propia sangre. (Hechos 20, 28)

  • Os recomiendo a Febe, nuestra hermana, que es diaconisa de la iglesia de Cencreas, (Romanos 16, 1)

  • a la Iglesia de Dios que está en Corinto, a los consagrados por Cristo Jesús, llamados y consagrados, con todos los que invocan en cualquier lugar el nombre de nuestro Señor Jesucristo, Señor de ellos y nuestro; (I Corintios 1, 2)

  • Para los asuntos de esta vida elegís como jueces a los que no tienen que ver nada con la Iglesia. (I Corintios 6, 4)

  • No escandalicéis ni a los judíos, ni a los paganos, ni a la Iglesia de Dios; (I Corintios 10, 32)

  • Pero si alguno quiere discutir este asunto, sepa que nosotros y la Iglesia no tenemos esta costumbre. (I Corintios 11, 16)

  • ¿Es que no tenéis vuestra casa para comer y beber? ¿O es que despreciáis a la Iglesia de Dios y queréis dejar en vergüenza a los que no tienen? ¿Qué os voy a decir? ¿He de felicitaros? En esto no os puedo felicitar. (I Corintios 11, 22)


“Quando a videira se separa da estaca que a sustenta, cai, e ao ficar na terra apodrece com todos os cachos que possui. Alerta, portanto, o demônio não dorme!” São Padre Pio de Pietrelcina