Gefunden 83 Ergebnisse für: Llamaba

  • Éstos son los reyes que reinaron en Edón antes que reinase rey alguno en Israel: Bela, hijo de Beor; su ciudad se llamaba Dinhabá. (I Crónicas 1, 43)

  • Murió Jusán y le sucedió Hadad, hijo de Bedad, que derrotó a los madianitas en los campos de Moab. Su ciudad se llamaba Avit. (I Crónicas 1, 46)

  • Murió Baal Janán y le sucedió Hodad; su ciudad se llamaba Pani y su mujer Mehetabel, hija de Matred de Mezahab. (I Crónicas 1, 50)

  • La mujer de Abisur se llamaba Abijail, de la que tuvo a Ajbán y Molid. (I Crónicas 2, 29)

  • Todos éstos fueron los hijos de David, sin contar los hijos de las concubinas. Tenían una hermana que se llamaba Tamar. (I Crónicas 3, 9)

  • Hijos de Jur, padre de Etán: Yezrael, Yismá y Yidbás. Tenían una hermana que se llamaba Haslelponí. (I Crónicas 4, 3)

  • Maquir tomó una mujer para Jupín y Supín. Su hermana se llamaba Maacá. El nombre del segundo hijo de Manasés era Selofjad. Selofjad tuvo hijas. (I Crónicas 7, 15)

  • Maacá, mujer de Maquir, tuvo un hijo y le llamó Fares. Su hermano se llamaba Seres, y sus hijos Ulán y Requen. (I Crónicas 7, 16)

  • El padre de Gabaón vivía en Gabaón. Su mujer se llamaba Maacá. (I Crónicas 8, 29)

  • Jeiel, padre de Gabaón, vivía en Gabaón. Su mujer se llamaba Maacá. (I Crónicas 9, 35)

  • David y todo Israel marcharon sobre Jerusalén, que se llamaba Jebús, en cuya región estaban establecidos los jebuseos. (I Crónicas 11, 4)

  • Roboán se reafirmó en Jerusalén y continuó su reinado. Tenía cuarenta y un años cuando comenzó a reinar, y reinó diecisiete años en Jerusalén, la ciudad elegida por el Señor entre todas las tribus de Israel para morada de su nombre. Su madre se llamaba Naamá, la amonita. (II Crónicas 12, 13)


“O Senhor sempre orienta e chama; mas não se quer segui-lo e responder-lhe, pois só se vê os próprios interesses. Às vezes, pelo fato de se ouvir sempre a Sua voz, ninguém mais se apercebe dela; mas o Senhor ilumina e chama. São os homens que se colocam na posição de não conseguir mais escutar.” São Padre Pio de Pietrelcina