Gefunden 111 Ergebnisse für: Vergüenza

  • Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra se despertarán; unos para la vida eterna, otros para la vergüenza y la ignominia perpetua. (Daniel 12, 2)

  • porque tenían vergüenza de descubrir su deseo de tener relaciones con ella; (Daniel 13, 11)

  • Descubriré su vergüenza a los ojos de sus amantes, y nadie la salvará de mi mano. (Oseas 2, 12)

  • Él también será llevado a Asiria como presente para el gran rey; Efraín recogerá vergüenza, e Israel se cubrirá de confusión por su ídolo. (Oseas 10, 6)

  • Comeréis hasta hartaros, y alabaréis el nombre del Señor, vuestro Dios, que ha obrado con vosotros maravillas. Nunca más mi pueblo será cubierto de vergüenza. (Joel 2, 26)

  • Sabréis que en medio de Israel estoy yo; que yo, el Señor, soy vuestro Dios y no hay otro. Nunca más mi pueblo será cubierto de vergüenza. (Joel 2, 27)

  • Por las matanzas, por las injusticias cometidas contra tu hermano Jacob, quedarás cubierto de vergüenza y serás exterminado para siempre. (Abdías 1, 10)

  • Vendrá entonces mi enemiga, cubierta de vergüenza; ella que me decía: "¿Dónde está el Señor, tu Dios?". Mis ojos se saciarán de mirarla cuando sea pisoteada como el lodo de las calles. (Miqueas 7, 10)

  • Las naciones lo verán y quedarán cubiertas de vergüenza, a pesar de todo su poder; pondrán la mano en la boca, y sus oídos quedarán sordos. (Miqueas 7, 16)

  • Aquí estoy contra ti -dice el Señor omnipotente-; yo alzaré tus faldas hasta tu cara y mostraré a las naciones tu desnudez, a los reinos tu vergüenza. (Nahún 3, 5)

  • Arrojaré suciedad contra ti, te cubriré de infamia y te expondré a la pública vergüenza. (Nahún 3, 6)

  • ¡Te has saciado de infamia, no de gloria! ¡Bebe tú también y muestra tu prepucio! A ti pasa la copa de la diestra del Señor, y después de la gloria viene la vergüenza. (Habacuc 2, 16)


“Meu Deus, perdoa-me. Nunca Te ofereci nada na minha vida e, agora, por este pouco que estou sofrendo, em comparação a tudo o que Tu sofreste na Cruz, eu reclamo injustamente!” São Padre Pio de Pietrelcina