Gefunden 100 Ergebnisse für: amonitas

  • Jefté envió mensajeros al rey de los amonitas con esta misión: "¿Qué tienes contra mí para que vengas a hacerme la guerra en mi tierra?". (Jueces 11, 12)

  • El rey de los amonitas respondió a los mensajeros de Jefté: "Porque Israel, cuando venía de Egipto, se apoderó de mi tierra desde el Arnón hasta el Yaboc y hasta el Jordán. Así que ahora devuélvemela pacíficamente". (Jueces 11, 13)

  • De nuevo Jefté envió mensajeros al rey de los amonitas (Jueces 11, 14)

  • con esta respuesta: "Esto dice Jefté: Israel no se apoderó de la tierra de los moabitas ni de la de los amonitas, (Jueces 11, 15)

  • Por tanto, yo no te he ofendido, pero tú me haces injuria declarándome la guerra. Que el Señor, el juez, juzgue hoy entre los israelitas y los amonitas". (Jueces 11, 27)

  • Pero el rey de los amonitas no escuchó las palabras que Jefté le mandó a decir. (Jueces 11, 28)

  • El espíritu del Señor vino sobre Jefté, que recorrió Galaad y Manasés, pasó a Mispá de Galaad, y de allí al territorio de los amonitas. (Jueces 11, 29)

  • Jefté hizo este voto al Señor: "Si pones en mis manos a los amonitas, (Jueces 11, 30)

  • el primero que salga de la puerta de mi casa para venir a mi encuentro cuando vuelva vencedor de los amonitas le ofreceré en holocausto al Señor". (Jueces 11, 31)

  • Jefté marchó contra los amonitas y el Señor los entregó en sus manos. (Jueces 11, 32)

  • Los derrotó desde Aroer hasta Minit, veinte ciudades, y hasta Abel Keramín. Fue una gran derrota, y los israelitas dominaron a los amonitas. (Jueces 11, 33)

  • Ella le respondió: "Si has hecho una promesa al Señor, padre mío, haz conmigo lo que has prometido, ya que el Señor te ha concedido vengarte de tus enemigos, los amonitas". (Jueces 11, 36)


O sábio elogia a mulher forte dizendo: os seu dedos manejaram o fuso. A roca é o alvo dos seus desejos. Fie, portanto, cada dia um pouco. Puxe fio a fio até a execução e, infalivelmente, você chegará ao fim. Mas não tenha pressa, pois senão você poderá misturar o fio com os nós e embaraçar tudo.” São Padre Pio de Pietrelcina