Gefunden 190 Ergebnisse für: caminos

  • Ha cortado mis caminos con piedras sillares, ha cerrado mis senderos. (Lamentaciones 3, 9)

  • Él descubrió los caminos de la sabiduría y se los enseñó a Jacob, su siervo, a Israel, su preferido. (Baruc 3, 37)

  • Mis hijos más mimados han tenido que recorrer caminos ásperos, han sido llevados como rebaño arrebatado por enemigos. (Baruc 4, 26)

  • Las mujeres ceñidas de cuerdas se sientan junto a los caminos quemando como incienso el salvado; (Baruc 6, 42)

  • Me diréis: El camino del Señor no es justo. Escucha, casa de Israel: ¿Que no son justos mis caminos? ¿No son más bien vuestros caminos los que no son justos? (Ezequiel 18, 25)

  • Mas la casa de Israel anda diciendo: Los caminos del Señor no son justos. ¿Que no son justos mis caminos, casa de Israel? ¿No son más bien los vuestros los que no son justos? (Ezequiel 18, 29)

  • "Y tú, hijo de hombre, traza dos caminos por donde llegue la espada del rey de Babilonia; de un mismo país partirán ambos. Pon una señal que, partiendo de allí, indique el camino que conduce a una ciudad. (Ezequiel 21, 24)

  • Pues el rey de Babilonia se ha detenido en una encrucijada donde los dos caminos se dividen, para consultar a la suerte. Ya sacude las flechas, interroga a sus ídolos, examina el hígado. (Ezequiel 21, 26)

  • Eras perfecto en tus caminos desde el día en que fuiste creado, hasta que apareció en ti la iniquidad. (Ezequiel 28, 15)

  • Diles: Por mi vida, dice el Señor Dios, que no me complazco en la muerte del malvado, sino en que se convierta de su conducta y viva. Convertíos, convertíos de vuestros perversos caminos. ¿Por qué queréis morir, oh casa de Israel? (Ezequiel 33, 11)

  • Pero las gentes de tu pueblo andan diciendo: ¡No es justo el camino del Señor, cuando son sus caminos los que no son justos! (Ezequiel 33, 17)

  • Porque eres justo en todo lo que has hecho, todas tus obras son verdad, rectos todos tus caminos, verdad todos tus juicios. (Daniel 3, 27)


“Combata vigorosamente, se está interessado em obter o prêmio destinado às almas fortes.” São Padre Pio de Pietrelcina