Gefunden 78 Ergebnisse für: cedros del Líbano

  • Como valles que se alargan, como jardines al borde de un río, como áloes plantados por el Señor, como cedros a la orilla del agua. (Números 24, 6)

  • Levantad el campamento y dirigíos a la montaña de los amorreos y a todas sus regiones vecinas: la Arabá, la montaña, la Sefela, el Negueb, el litoral, la tierra de los cananeos, el Líbano, hasta el río grande, el Éufrates. (Deuteronomio 1, 7)

  • Permíteme cruzar, para ver la excelente tierra del lado de allá del Jordán, esa hermosa montaña y el Líbano. (Deuteronomio 3, 25)

  • Todo lo que pise la planta de vuestros pies será vuestro, y vuestras fronteras se extenderán desde el desierto al Líbano, desde el río Éufrates al mar Mediterráneo. (Deuteronomio 11, 24)

  • Vuestro territorio abarcará desde el desierto y el Líbano hasta el gran río, el Éufrates, y, por el oeste, hasta el mar Mediterráneo. (Josué 1, 4)

  • Cuando se enteraron de estas cosas los reyes de Cisjordania, de la montaña, de la Sefela y de toda la costa del mar Mediterráneo hasta el Líbano: hititas, amorreos, cananeos, fereceos, heveos y jebuseos, (Josué 9, 1)

  • desde el monte Pelado, que sube hacia Seír, hasta Baal Gad, en el valle del Líbano, a los pies del monte Hermón; se apoderó de todos sus reyes, a los que derrotó y dio muerte. (Josué 11, 17)

  • Éstos son los reyes del país a los que Josué y los israelitas derrotaron en Cisjordania, desde Baal Gad, en el valle del Líbano, hasta el monte Pelado, que sube hasta Seír, cuyo territorio repartió en propiedad a las tribus de Israel según sus familias, (Josué 12, 7)

  • además, el país de los guiblitas y todo el Líbano, al oriente, desde Baal Gad, a los pies del monte Hermón, hasta la entrada de Jamat. (Josué 13, 5)

  • Todos los habitantes de la montaña del Líbano hasta Misrefot, al occidente, y los sidonios. Yo los expulsaré ante los israelitas. Ahora reparte por suertes esta tierra a los israelitas, como yo te he ordenado. (Josué 13, 6)

  • Los cinco principados filisteos, todos los cananeos, los sidonios y los hititas que habitaban la montaña del Líbano, desde la montaña de Baal Hermón hasta la entrada de Jamat. (Jueces 3, 3)

  • La zarza espinosa les respondió: Si de verdad queréis ungirme por vuestro rey, venid y refugiaos a mi sombra; y si no, saldrá fuego de la zarza y devorará a los cedros del Líbano. (Jueces 9, 15)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina