Gefunden 143 Ergebnisse für: paso

  • Lo que es, ya fue; lo que será, es ya, y Dios vuelve a traer lo que pasó. (Eclesiastés 3, 15)

  • Además, pasó todos sus días en la oscuridad, afligido, deprimido e irritado. (Eclesiastés 5, 16)

  • Pues nuestra vida es el paso de una sombra, nuestro fin es sin retorno; porque se pone el sello y nadie vuelve. (Sabiduría 2, 5)

  • Todo aquello pasó como una sombra y como un rumor fugitivo. (Sabiduría 5, 9)

  • Como nave que corta las aguas ondulantes, de cuyo paso es imposible encontrar rastro ni sendero de su quilla entre las olas. (Sabiduría 5, 10)

  • O como ave que con su vuelo rasga la brisa, sin dejar vestigio alguno de su paso; que azota con el batir de sus alas el aire ligero y lo corta con ímpetu veloz, abriéndose camino con sus raudas alas, y tras esto ni rastro queda de su paso. (Sabiduría 5, 11)

  • Aunque no hubiera nada terrible que pudiera asustarlos, ellos, sobresaltados por el paso de los animales y el silbido de las serpientes (Sabiduría 17, 9)

  • Por allí pasó un pueblo en masa, protegido por tu mano, contemplando prodigios admirables. (Sabiduría 19, 8)

  • No será más poblada ni habitada al paso de las generaciones; el árabe no alzará allí su tienda, ni el pastor apacentará su ganado. (Isaías 13, 20)

  • ¿Quién ha suscitado del Oriente a aquel que apela a la justicia a cada paso? ¿Quién le entrega las naciones y le somete los reyes? Su espada los reduce a polvo, su arco los dispersa como paja. (Isaías 41, 2)

  • Pues he escuchado la calumnia de la gente: "¡Terror por todas partes! ¡Anunciadlo, anunciémoslo!". Todos los que eran mis amigos me espiaban a ver si daba un paso en falso: "¡Quizás se deje seducir; nosotros lo venceremos y nos vengaremos de él!". (Jeremías 20, 10)

  • A los príncipes de Judá y Jerusalén, a los eunucos, a los sacerdotes y a todo el pueblo del país que pasó por entre los dos trozos del novillo, (Jeremías 34, 19)


“Onde não há obediência, não há virtude. Onde não há virtude, não há bem, não há amor; e onde não há amor, não há Deus; e sem Deus não se chega ao Paraíso. Tudo isso é como uma escada: se faltar um degrau, caímos”. São Padre Pio de Pietrelcina