Salmos, 109
7. cuando lo juzguen, que salga condenado, que su propia defensa lo condene;
7. cuando lo juzguen, que salga condenado, que su propia defensa lo condene;
“Viva feliz. Sirva ao Senhor alegremente e com o espírito despreocupado.” São Padre Pio de Pietrelcina