5. y, al amanecer, se levantaron y avanzaron hacia la llanura. De pronto divisaron un numeroso ejército, compuesto de soldados y jinetes, que venía a su encuentro. Entre ellos se interponía un torrente.





“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina