5. Él les dijo: "El Señor es testigo contra ustedes, y también su ungido es testigo en este día, de que nunca me han sorprendido con nada en la mano". Ellos le dijeron: "¡Sí, es testigo!".





“Subamos sem nos cansarmos, sob a celeste vista do Salvador. Distanciemo-nos das afeições terrenas. Despojemo-nos do homem velho e vistamo-nos do homem novo. Aspiremos à felicidade que nos está reservada.” São Padre Pio de Pietrelcina