Lamentaciones, 1
19. Llamé a mis amantes, pero ellos me engañaron. Mis sacerdotes y mis ancianos han expirado en la ciudad, mientras buscaban alimento para recobrar sus fuerzas.
19. Llamé a mis amantes, pero ellos me engañaron. Mis sacerdotes y mis ancianos han expirado en la ciudad, mientras buscaban alimento para recobrar sus fuerzas.
“Você teme um homem,um pobre instrumento nas mãos de Deus, mas não teme a justiça divina?” São Padre Pio de Pietrelcina